El Real Valladolid se conjuró en el vestuario y realizó un gran partido en el Santiago Bernabéu, aunque al final no consiguió puntar. Después de estrellar dos balones en los palos de Courtois, cayó derrotado con un gol en propia puerta de Kiko Olivas y otro de Sergio Ramos de penalti
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión