Juventus-BarcelonaNeymar justifica que el PSG quiera pagar la cláusula para ficharle

Estaba Neymar centrando todo el interés informativo durante la gira americana del Barcelona hasta que llegó el primer partido de la era Valverde. El fútbol dejaba paso a los rumores y al mercadeo habitual de estas fechas. Pero Neymar se resistió a abandonar su protagonismo para prolongarlo a lo largo y ancho del Metlife Stadium ante una Juventus que le sufrió de lo lindo. El paulista se erigió en el auténtico crack que ha provocó en su momento el fichaje por parte del Barcelona, su millonaria renovación y ahora el interés del PSG. Viendo el partido del brasileño se entiendo perfectamente que el jeque Nasser Al-Khelaifi esté dispuesto a poner encima de la mesa los 222 millones de euros de su cláusula de rescisión.

Tardó solo un cuarto de hora en batir a Buffon tras una jugada en la que participaron Leo Messi y Paco Alcácer, sus compañeros de ataque, puesto que Luis Suárez partió en esta ocasión desde el banquillo. Neymar recibió un balón interior de Messi y perforó la portería italiana tras una precisa pared con Alcácer. Pero si su primer gol fue de una bella factura, el segundo podría utilizarlo en las negociaciones con el PSG para que el jeque le ponga un pozo de petróleo a su nombre. Fue capaz de deshacerse de cinco jugadores de la Juventus dentro del área antes de batir a uno de los porteros menos goleados de Europa.

Neymar lo ha celebrado con rabia, saltando y levantando el puño. No parecía un amistoso. Y si alguien esperaba que se besara el escudo como señal de sus intenciones se quedó con las ganas para regocijo de los seguidores del PSG, que ya no dudan en la valía del brasileño. No obstante, puede que las dudas le entren a él, ya que ante la Juventus volvió a revivir sensaciones y seguro que tuvo la certeza que en pocos equipos podrá brillar tanto y disfrutar como en el Barcelona. Y para ello se esforzaron sus compañeros, que le arroparon y trataron de que se sintiera cómodo. Era el mejor discurso para convencerle para que aborte en su intención de marcharse. Hasta Messi le dejó lanzar una falta.

Al margen de la actuación de Neymar, el partido dejó algunas conclusiones. La principal es que Messi está enchufado y en forma. No marcó pero demostró mantener la chispa que le hace diferente a los demás. La segunda, que el estilo del Barcelona permanecerá inalterable con Valverde en el banquillo. El técnico le imprimirá, con el tiempo, su huella pero el esquema es reconocible, ofensivo e intenso. Y la tercera, las intenciones del entrenador con respecto a los futbolistas que no entran en sus planes. Si le dio una oportunidad a Samper y a Arda Turan, descartó a tres futbolistas que están llamados a buscarse las habichuelas lejos del Camp Nou: Douglas Pereira, Munir y Vermaelen. No debería olvidar Valverde, no obstante, que estos partidos son grandes escaparates para colocar jugadores con los que no se cuenta.

A pesar de los pocos entrenamientos que llevan disputados y el sofocante calor y humedad de Nueva Jersey, la primera parte fue esperanzadora. Se vio mucha intensidad y ritmo. El equipo solidario en defensa con los delanteros trabajando para recuperar balones, como demuestra que hasta Messi bajara al centro del campo para defender y recuperar una pelota. A los dos minutos el Barcelona ya había dispuesto de dos ocasiones claras y a lo largo de los primeros 45 minutos no concedió facilidades a la Juventus.

La segunda parte comenzó con once futbolistas diferentes por parte del Barcelona. Valverde los cambió a todos, incluido el portero. Partido completamente nuevo y diferente en el que el gran aliciente estuvo en ver la integración y las evoluciones del nuevo fichaje azulgrana, Nelson Semedo. El ex jugador del Benfica se colocó en la banda derecha sustituyendo a un Aleix Vidal que mostró una muy buena cara, prodigándose en ataque y rápido en defensa. La llegada del portugués permitió que Sergi Roberto regresara a su puesto natural, el de interior derecho.

A falta de media hora para el final, Massimiliano Allegri movió a fondo el banquillo y apareció la Juventus de verdad, el equipo que más se acercaría a la disputa de un partido oficial, con Chiellini, Pjanic, Douglas Costa, Cuadrado, Higuaín y Dyabal, entre otros. Y los italianos solo tardaron cuatro minutos en recortar distancias con un buen remate de Chiellini, que volvió a coincidir sobre el terreno de juego con Luis Suárez, aunque el mordisco del Mundial ya está mas que olvidado, aunque el italiano le dejo la rodilla marcada en el muslo. El uruguayo se mostró igual de peleón que siempre pero sin la fortuna habitual. Tampoco sus compañeros de tridente eran los mismos. Arda Turan y Denis Suárez no son Neymar ni Messi. Marlon y Umtiti sufrieron más de la cuenta para sujetar a los delanteros transalpinos aunque al final lograron salir airosos.

Valverde comenzó con una victoria ante el subcampeón de Europa y equipo que le vapuleó en Turín en la ida de los cuartos de final de la Champions League. Inicio esperanzador para la masa social azulgrana, cuya única preocupación durante esta pretemporada será ver cómo concluye el culebrón de cada año, el de los flirteos de Neymar con el PSG. ¿Jugará el brasileño el próximo jueves ante el Manchester United o se habra enfundado ya la camiseta del club francés?

La ficha

Juventus: Buffon; Lichsteiner, Benatia, Barzagli, Asamoah; Marchisio, Khedira; Stuaro, Lemina, Betancur y Mandzikic.

También jugaron: Szczesny, Chiellini, Pjanic, Rincón, Douglas Costa, Higuaín, Cuadrado, Dybala, Alex Sandro y Mandragora.

Barcelona: Cillessen; Aleix Vidal, Piqué, Mascherano, Digne; Rakitic, Samper, Iniesta; Messi, Alcácer y Neymar.

También jugaron: Ortolá, Semedo, Marlon, Umtiti, Jordi Alba, Aleñá, Busquets, Sergi Roberto, Denis, Luis Suárez y Arda Turan.

Goles: o-1 Neymar (15'), 0-2 Neymar (25'), 1-2 Chiellini (62').