Carlo Ancelotti se trae a la famiglia

«Carlo Ancelotti se trae a la famiglia», así titula el diario muniqués Süddeutsche la llegada de Carlo Ancelotti (57) al Bayern Múnich –que el miércoles cumple su tercer día en el club bávaro– con un equipo formado por familia y amigos. La foto (de familia) del equipo –de izquierda a derecha– que acompaña al exentrenador del Real Madrid incluye a Francesco Mauri (27), preparador físico especializado en rehabilitación, hijo de Giovanni Mauri preparador en el Real de Ancelotti; así como Davide Ancelotti (26), el hijo del primer matrimonio del técnico italiano que ejercerá en el Bayern como asistente de entrenador tal y como en el Real y en el París Saint-Germain. También está el inglés Paul Clement (44) que hasta febrero fue entrenador del Derby County y que acompañó a Ancelotti como asistente en el Real, el Chealsea y en el Saint-Germain.

En el medio, el entrenador jefe, padre de Davide y suegro de Mino Fulco (31); a la izquierda de Ancelotti: Giovanni Mauri (59), padre de Francesco y según Ancelotti el mejor preparador físico del mundo que acompaña al actual entrenador del Bayern desde 1996; Fulco, marido de la hija de Ancelotti, Katia, el responsable de nutrición que comenzó con el técnico en el Real; Holger Broich (41), es el jefe de salud y preparación física proveniente de la competencia del Bayern (el Leverkusen); Hermann Gerland (62), ícono del Club y asistente de entrenador; y finalmente Toni Tapalovic (35), entrenador de porteros.

Los medios alemanes han resaltado el hecho que su equipo de entrenamiento esté formado por semejante cantidad de familiares y amigos. Pero también declaraciones de algunos jugadores como el capitán Philipp Lahm que ha declarado que es «una persona muy agradable». Otros han sido más directos como Mats Hummels quien ha indicado que «convenceré rápidamente al señor Ancelotti». La prensa alemana también ha destacado la coincidencia que el hermano menor de Mario Götze, Felix, se encontró con Ancelotti mientras entrenaba antes que Mario. Tampoco han faltado referencias a la nota de buena suerte escrita en italiano que Guardiola le dejó a su predecesor.