Tour de Francia

Bernal, talento precoz para marcar una era

El colombiano, con solo 22 años, ha acortado los tiempos para llegar a ser líder del Ineos

Egan Bernal AFP

J. Gómez Peña

«No sabía qué pasaba. Algo decían por la emisora, pero hablaban en inglés. Luego han dicho en español que paraban la etapa. Yo no quería, claro. Iba a todo gas», relató Egan Bernal, nuevo líder del Tour tras la etapa neutralizada ayer por una avalancha de granizo y tierra. Hoy saldrá a «defender» el maillot amarillo en Val Thorens. Si lo consigue será mañana en París el vencedor más joven (22 años) de la época moderna. Un elegido. Y con tiempo de sobra para fundar su era. « A veces piensas en vestir un día de amarillo . Lo imaginas, pero no lo crees», dijo. «No quiero pensar en el futuro. Solo en disfrutar del ciclismo, de las carreras, del miedo a fallar, de la adrenalina». Bernal es un chaval, un portento que ha acortado a saltos todos los plazos.

Y se atreve. «En el Iseran tenía dos opciones. Si no atacaba estaba seguro de que tenía un sitio en el podio. Pero si atacaba podía ganar el Tour aunque me arriesgaba a perder el podio. No quería quedarme con esa duda, con esa espina ». La actitud de los campeones. «Entre Thomas y yo teníamos que descolgar a Alaphilippe en el Iseran». Al exlíder francés le cayó encima la avalancha del Ineos. Sepultado en el techo del Tour, el Iseran y sus 2.770 metros.

Los colombianos son los vecinos de arriba en el edificio del ciclismo mundial. Zipaquirá, en el departamento de Cundinamarca, está a 2.650 metros de altitud . En este lugar donde los indios hicieron de la sal su oro, nació y creció Egan Bernal. Allí estudió también Gabriel García Márquez, premio Nobel de Literatura en 1982. Para uno de sus personajes escribió esta frase: «La ilusión no se come». Y así respondió el coronel: «No se come, pero alimenta».

La pasión por el ciclismo nace como un desafío en la infancia. Bernal tenía muchos. Uno de esos retos subía hasta Pacho, el pueblo de su madre. A 3.600 metros de altitud, donde a alguien acostumbrado a respirar al nivel del mar le falta oxígeno. La genética hizo su trabajo durante generaciones. Allí cuando sale un ciclista es como un sherpa del Himalaya. Y salen. Efraín Forero, ganador de la primera Vuelta a Colombia, en 1951, es de esta zona.

Durante años, Bernal se impuso como meta coronar Pacho en menos de una hora . No lo hizo hasta esta primavera, un par de semanas antes de la París-Niza. Batió el récord y lo dejó en 56 minutos. Ya estaba listo para todo, incluso para el Tour. Cuando el año pasado fichó por el Sky, ahora Ineos, el preparador físico vizcaíno Xabier Artetxe le diseñó un plan para tres temporadas: de los 21 a los 23 años. En ese plazo querían convertirlo en líder de mejor equipo del mundo. Sonaba ambicioso. Bernal ha acortado los tiempos . En el Tour de 2018, su debut, fue la sensación en la montaña, tiró de Froome y Thomas y terminó decimoquinto con toda esa carga de trabajo.

A este Tour no tenía que haber venido. Pero dos carambolas le trajeron. Primero se cayó él durante un entrenamiento en Andorra. «Se rompió una clavícula un sábado y el domingo ya fue operado. Ocho días después pedaleaba sobre el rodillo» , recuerda Artetxe. Ese tropiezo le apartó del Giro, su objetivo inicial. Luego fue Froome, líder para el Tour, el que se rompió varios huesos en junio en el Dauphiné y quedó descartado. El Ineos dejó los galones sobre la mesa, al alcance de Geraint Thomas, vencedor de la última Grande Boucle, y también de Bernal, el talento emergente.

En la escuadra británica respetaron el status del galés, pero tuvieron en cuenta que esta edición terminaba en el Galibier, el Iseran y Val Thorens , tres montañas que desde los Alpes franceses miran cara a cara a Zipaquirá. Altitudes gemelas. Y ahí, tan arriba, los que mejor respiran son los colombianos como Bernal , los vecinos del ático. Bernal vive en Andorra, otro piso elevado. Por su relación con Artetxe ha pasado temporadas en Gernika y Morga. Ensayando en las rampas de Sollube sus pedaladas del Iseran. «Al principio pensábamos que la próxima temporada podría disputar ya una gran vuelta. Pero se ha adelantado. Es un talento precoz», define Artetxe. El Tour lo está comprobando.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación