CÁDIZ CF

Cádiz CF-Zaragoza: Tras la caída, toca levantarse

Sankaré y Álvaro regresan al once ante un Zaragoza plagado de grandes futbolistas pero que aún no ha ganado a domicilio

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Los futbolistas del Cádiz quieren recuperar el buen tono tras la derrota en Tarragona.
Los futbolistas del Cádiz quieren recuperar el buen tono tras la derrota en Tarragona.

La Segunda es como una ‘Spartan Race’ de nueve meses, una carrera de obstáculos que superar sin desmayo y con una ‘sorpresa’ en cada zancada. Hay que lanzarse al suelo para cruzar bajo el alambre, escalar muros, aferrarse a las cuerdas, retozar en el fango y mantener el equilibrio. Todo sin dejar de avanzar. Una prueba que requiere un tremendo esfuerzo físico y sobre todo mental para no aflojar, para no rendirse, para seguir hacia adelante.

Así va a ser el año, no sólo para el Cádiz CF sino para el resto de competidores que lucharán hasta la extenuación por no perder el pie, por no caerse, por no quedar entre los cuatro últimos. Una jornada sonreirá henchido de satisfacción al dejar atrás esa pronunciada subida y a la siguiente sin mayor explicación vendrá el batacazo al no sortear la piedra del sendero.

Caer está permitido, lo prohibido es no levantarse. La regularidad en resultados es una quimera por lo que se debe mantener en la esencia, la idea, la filosofía y la confianza.

A estas alturas y con escasas referencias a las que agarrarse, da igual si el adversario superado o el contrario insurrecto es el líder o el colista. En el ‘Black Friday’ (viernes negrísimo) de la semana anterior el Cádiz CF mordía el polvo en Tarragona. Como es habitual, estuvo tan cerca de la gloria como del fracaso y quedó atrás. Lección aprendida, y un nuevo reto de superación que afrontar para demostrar la madurez.

Sin apenas descanso llega un ‘clásico’ de tiempos mejores que evocan recuerdos nostálgicos, como aquel debut de una estrella que brillaba desde su estreno, Kiko Narváez, o la alianza merced a la figura de Pepe Mejías, adorado tanto en la Bahía de Cádiz como a orillas del Ebro. El Zaragoza. Suena a Primera, pero su situación es tan anómala que en este momento, el club de los cinco magníficos, el de Pikolín y el de la Recopa de Nayim está igualado a puntos con los amarillos en la Liga 123. Hay que aprovecharlo ¿no?

Diferencia de calidad

El desequilibrio en las plantillas, decente la amarilla y tremenda la maña, se equipara debido al estado anímico de ambos conjuntos y a las ausencias obligadas que merman al cuadro blanquillo.

Cervera sólo pierde a Luis Ruiz en el lateral zurdo, ocupado por Brian, y dispone de todo su arsenal con el regreso de Sankaré y Alvarito. Contundencia y pegada. Agné, uno de tantos al que se le indigestó el desagradable Cádiz de Segunda B, sufre bajas en todas las líneas. Marcelo Silva en defensa, Javi Ros en mediocampo y Edu García en la delantera tras sufrir un doloroso pisotón en ‘salva sea la parte’.

La hinchada amarilla sabe perfectamente qué se va a encontrar esta tarde-noche (20 horas) en el tapete del Ramón de Carranza, mientras que la aragonesa ni prevé si su equipo llevará el control o pasará al contragolpe. Ideas claras que ha inyectado Cervera y que en el enemigo discurren sin orden tras el cambio en el banquillo.

El tercero más goleado

La única duda en el once tipo de los locales se genera en la misma demarcación, la consabida mediapunta y sus inquilinos inconstantes. El fiasco con Abdullah en Tarragona lleva a pensar que la rueda seguirá girando y le toca a Rubén Cruz, con Garrido y José Mari por detrás. En cambio, el tridente zaragocista no admite discusión, con Cani, Lanzarote y Ángel formando una vanguardia inigualable en la categoría.

Con una zaga solvente, el Cádiz CF pugna por mejorar en ataque mientras que el Zaragoza necesita unir líneas para no encajar con tanta facilidad. Es el tercer equipo con más goles en contra (22), algo inasumible en su condición de favorito. Y aún no se ha estrenado con una victoria a domicilio. Una pésima racha que los cadistas desean alargar al menos dos jornadas más.

Consistencia contra pólvora, ilusión contra calidad, la Segunda ofrece un espectáculo de esos que se soñaban en Carranza hace muy poquitos meses. Días para reflexionar y, por qué no, para soñar. Pero primero, toca levantarse.

Ver los comentarios