Euroliga
Gran Canaria sufre su novena derrota seguida en un buen debut de Wiley
Crónica
El Herbalife Gran Canaria plantó cara durante tres cuartos al Panathinaikos, pero se vino abajo en el último y sufrió su novena derrota consecutiva en la Euroliga (80-99), en un partido en el que cabe resaltar el prometedor debut del estadounidense Jacob Wiley con los isleños.
El primer cuarto fue sumamente dinámico, con dos equipos entregados al juego de ataque y encestando con facilidad, con lo que las ventajas para uno y otro fueron mínimas, con excepción de los cinco puntos de renta que le proporcionó al Gran Canaria un triple de Rabaseda (19-14).
El conjunto local de Víctor García, con Radicevic recuperado de su prolongada lesión, y uno de los dos recientes refuerzos, el norteamericano Jacob Wiley, en el quinteto inicial, vio cómo Panathinaikos finalizaba este parcial con ventaja, merced al daño que hacía el gigante Papagiannis y una postrera canasta de Langford (28-30).
El segundo cuarto comenzó con encestes de Wiley y su compañero Cory Jefferson -el otro debutante-, con lo que Herbalife retomaba el mando en el marcador (30-28), pero poco después los pupilos de Rick Pitino se iban de cinco, con un triple de Papapetrou y un tiro libre posterior del propio jugador heleno (32-36).
Los isleños entraron en unos minutos en los que erraban sus tiros y Víctor García paró el partido con 32-38 tras una canasta de Papagiannis, aunque los visitantes, con un parcial de 0-12, obligaron al técnico insular a volver a pedir otro a falta de 2.32 para llegarse al descanso, con 32-44 y los aficionados griegos disfrutando al máximo.
Sin embargo, la reacción del Herbalife no se hizo esperar y, con dos triples consecutivos de Radicevic y Rabaseda, más otros dos puntos del alero nacional, el marcador se situó en 40-44 y Pitino tuvo que solicitar tiempo con 1.10 aún por disputarse.
Panathinaikos volvió a distanciarse con dos triples de Calathes, pero otro de un muy acertado Rabaseda hizo que el partido llegase al ecuador con apenas cinco puntos de renta para los visitantes (45-50).
La segunda mitad comenzó de una forma trepidante, y Herbalife, con un muy motivado y activo Wiley, empataba rápidamente a 55, poco después de que Antetokounmpo se fuese al banquillo con tres personales, como ocurrió instantes más tarde con Radicevic.
Gran Canaria seguía metido en el partido a falta de tres minutos para llegarse al último cuarto (60-65), pero a Panathinaikos no le tembló el pulso y se fue al parcial definitivo con siete puntos arriba (66-73).
El habilidoso e inspirado Langford metió un triple al empezar el último cuarto (66-76) y, a continuación, su equipo puso la directa y se marchó de 12 (68-80) con los puntos de Kilpatrick, ventaja que aumentó hasta los 15 con una fácil entrada a canasta de Antetokounmpo (69-84).
Herbalife, que un encuentro más se venía abajo en el último cuarto, solo tenía menos de siete minutos por delante para intentar romper su mala racha en Europa, aunque los visitantes rompían con relativa sencillez la defensa insular e impedían a los grancanarios acercarse demasiado (75-86 con 3.42 para el término).
Los últimos minutos, con el choque totalmente decidido, sirvieron para dar rodaje a Jefferson en un Gran Canaria que el domingo tiene una nueva final liguera ante San Pablo en Burgos.
