Sara Baras en un momento de «La Pepa»
Sara Baras en un momento de «La Pepa» - EFE
crítica

Sara Baras, en la cumbre de su arte

En «La Pepa» la artista aparece espléndida, convertida en la bailaora de muestro tiempo por excelencia

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Desde la dramaturgia que lo sostiene, basada en estampas que representan el Cádiz de la Cortes (1810-1812), hasta la exhibición de los percusionistas, tocando el solitario,«La Pepa» es posiblemente el espectáculo flamenco más original de los últimos tiempos. Un espectáculo cuya coreografía es sumamente brillante y plena de múltiples movimientos y matices, en el que se luce un cuerpo de baile verdaderamente extraordinario. Un espectáculo en el que la guitarra cumple un papel importantísimo. Lo mismo que el grupode cantaores.

Y arropada por tan excelente colaboración, la estrella, Sara Baras ha conseguido elevarse al cenit de su arte. Desde su braceo, bello y elegante, personalísimo, hasta sus zapateados prodigiosos y sus vaporoso vestidos, su baile es auténticamente admirable en su salada gaditanía.

El programa de «La Pepa», que así se le llamó a la primera constitución española, por su proclamación el día de San José, está compuesto de once estampas. La primera, con fondo de martinete, simula el horror de la Guerra de la Independencia. Le sigue la titulada «El mar de la libertad» y «El Puerto de Cádiz», escenas en las que se canta y se baila por guajira, fandangos y seguidillas. Y es en la soleá, en «Las Cortes de Cádiz», donde Sara Baras ofrece un solemne lección.

Luego aparece la malagueña en «Misa de Acción de Gracias», para inmediatamente dar paso a los tanguillos en «El pueblo gaditano». Finalmente, en «La Pepa 2012» y en el fin de fiesta, bullen las alegrías y las bulerías, con una Sara Baras espléndida, convertida en la bailaora de muestro tiempo por excelencia. El público puesto de pie, aplaudió larga y cerradamente.

Ver los comentarios