La violinista Lina Tur Bonet, de Musica Alchemica
La violinista Lina Tur Bonet, de Musica Alchemica - ABC
CRÍTICA DE MÚSICA

Festival Pórtico de Zamora: la exacta dimensión

El certamen zamorano ha ofrecido conciertos de Musica Alchemica y Al Ayre español, entre otros conjuntos

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Durante quince años el festival Pórtico de Zamora ha trabajado demostrando que no hay arquitectura sin música. Parece algo obvio, especialmente si un proyecto semejante se concentra en la capital castellana del Románico, pero lo evidente no siempre es lógico. Las dificultades económicas en las últimas ediciones y, junto a ellas, la poca consideración hacía el proyecto significa que su actual buen estado debe mucho a la coproducción con el Centro Nacional de Difusión Musical y otros pequeños patrocinios.

Festival Pórtico de Zamora (****)
Intérpretes: Musica Alchemica , Adolfo Gutiérrez Arenas

El director artístico, Alberto Martín, tiene palabras de agradecimiento para todos. Él es responsable de que durante tres días Pórtico de Zamora devuelva a su ciudad mucho más de lo que da. La afición local y un notable número de espectadores que acuden, en fechas de la quincena inmediatamente anterior a la Semana Santa desde muy distintos lugares, la pasean reuniéndose en la iglesia de San Cipriano, una de las más antiguas de Zamora, reconstruida en los ochenta, retirada del culto y sede central del Pórtico.

Algunos conciertos recién celebrados sirven de ejemplo a la actual dimensión del Pórtico de Zamora. Brillante, incisiva, promoviendo un estilo de especial elocuencia, MUSIca ALcheMIca, que capitanea la volinista Lina Tur Bonet, reunió un concierto alrededor de Vivaldi y Bach. Porque la música antigua es la base del festival en tanto también es capaz de generar otros repertorios. Así el violonchelista Adolfo Gutiérrez Arenas encontró consecuencias de las suites de Bach en Britten y en Adolfo Gutiérrez Viejo, autor de coherentes obras de nuevo cuño.

En Zamora hay arquitectura, pero se puede penetrar en la luz de la noche, en el gesto escénico tal y como lo construye de manera originalísima Dialogos Ensemble de Katarina Livljanic. «Swithun!» parte de primeras polifonías medievales en torno a dos personajes: San Swithun (Suituno), cuyo culto y milagros han dejado rastro en la historia de Winchester, y Wulfstan, el chantre de la catedral de aquella localidad en el año 1000. Y en el remate Al Ayre Español defendiendo las sonatas, opus 5 de Haendel. La huella de todos ellos se reconoce en el entusiasmo de que quienes disfrutan esta cita veterana.

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