Cádiz se rinde ante su 'Hijo del levante'

Cuando las manecillas del reloj marcaban las 22.45 horas, El Barrio hacía su aparición ante un abarrotado Castillo de San Sebastián. El anuncio de 'no hay billetes' ya hacía presagiar la presencia de miles de 'barrieros' en el recinto para arropar al artista y ser testigos de una noche mágica a orillas del Atlántico. Porque si algo estaba claro es que éste no era un concierto cualquiera, sino que era una cita histórica debido a los años de ausencia que El Barrio se ha llevado sin actuar en Cádiz.

La última vez lo hizo en el Gran Teatro Falla y con uno de sus discos más flamencos, ahora mueve masas y llena estadios y plaza de toros de toda la geografía española.

'He vuelto', emblemática frase del cantante en su regreso, ha creado adicción entre sus seguidores y anoche cobraba más sentido que nunca, porque esa fuerza con la que el artista irrumpió en el escenario hizo temblar los cimientos de la fortificación gaditana. Porque José Luis Figuereo regresó con su nuevo álbum tras tres años de ausencia, pero también ha vuelto a cantarle a su tierra natal, después de 15 años de orfandad.

El recinto, abarrotado, congregó a un público diverso, porque el fenómeno de El Barrio lo abarca todo, desde familias con niños hasta jóvenes que maduran con la música del cantautor. Los que vinieron de fuera pudieron disfrutar de un espectáculo inédito con temas que aluden a Cádiz como son los dedicados al barrio que le vio nacer, canciones que el artista no suele cantar en otros lugares. Así, se pudo disfrutar de un espectáculo gaditano con su barrio de Santa María por bandera y descrito con olores, calles e historias llena de nostalgia relatadas por una de las mejores personas que podrían hacerlo. Porque cuando El Barrio canta para su gente, se nota.

Asimismo, cabe destacar que el público no era genuinamente gaditano en su mayoría, ya que sus seguidores no conocen fronteras y no tienen problemas para desplazarse a cualquier lugar de España para disfrutar del artista.

Así, entre los asistentes había gente de Teruel, Córdoba y otros puntos de la geografía española, además de turistas extranjeros, interesados en su música. Al parecer, anoche, muchos gaditanos se repartieron con la otra cita flamenca de la jornada (no en vano el tráfico en el casco histórico estaba colapsado al coincidir ambos eventos), pero bastantes caras conocidas se dieron cita en San Sebastián, entre ellas la parlamentaria Teresa Rodríguez. Pero era de esperar y la 'batalla' la ganó el 'Hijo del Levante' congregando a más de tres mil gargantas que vibraron con la música 'barriera'.

El gaditano, que desgranó todos los temas de su último disco 'Hijo del Levante', ha dado un repaso al amor y al desamor como si de la historia de un cuento se tratase. Le ha cantado a la trágica enfermedad del Alzheimer, al maltrato y así, con estos destellos de realidad cala con su música, dejando al espectador reflejado en su propia alma. Esperanza, realidad, nostalgia y recuerdos de una vida se mezclaron durante el espectáculo que si hubiese sido por el público hubiese durado hasta el amanecer.

El cantautor también recordó temas de sus álbumes más sonados y, por supuesto, el flamenco estuvo también presente como siempre con letras por bulerías que sacaron lo mejor de su grupo.

En una entrevista concedida a este medio, el artista se mostraba feliz de poder cantar de nuevo en Cádiz, tras el paréntesis, y aseguraba que era «un privilegio poder ir a uno de mis conciertos andando, sin tener que coger tren, coche o avión».