Piglia, el hombre que siempre llega a tiempo, recibe el premio Formentor 2015

Muchas veces lamentamos que los premios llegan tarde; que el reconocimiento y los honores aparecen al poco de extinguirse aquel que se los merecía. Y es cierto. Pero también hay otras veces en las que se puede celebrar que quien no llega a tiempo es el premiado, como le ocurrió ayer a Ricardo Piglia, galardonado con el Premio Formentor de las Letras 2015.

El escritor no pudo recoger el premio porque lleva tiempo aquejado de ELA, pero su sentido del humor debe seguir intacto. «Nunca he podido estar en el lugar indicado en el momento justo. Siempre llego demasiado tarde o demasiado temprano. O no llego, como en este caso», bromeaba en su discurso de agradecimiento. En lugar del autor —al que muchos sitúan dentro de la literatura argentina solo por detrás de Borges— aparecieron su nieta, Carlota Pedersen, su editor, Jorge Herralde, y su amigo y agente literario, Guillermo Schavelzon.

Lo que viene...

El premio coincide con la publicación en Anagrama de «Los diarios de Emilio Renzi», la que su entorno considera la gran «obra maestra» del escritor argentino. «Para mí Emilio Renzi es una criatura en el mejor sentido de la palabra. Su alter ego», llegó a decir ayer Guillermo Schavelzon. «Quien busque en estos diarios un relato de confesiones personales se va a quedar muy decepcionado —advirtió—. Sí mantiene la entrada tradicional de fechas, pero tenemos la tendencia a tomar como real y autobiográfico todo lo que leemos».

La particularidad de esta obra radica en que empezó a escribirla siendo casi un adolescente. Y en ella, por paranormal que parezca, se proyecta la práctica totalidad de su carrera. Ricardo Piglia decía que él escribía novelas y otro tipo de encargos para ganarse el favor de los editores y que algún día le publicasen sus famosos diarios. «Emilio Renzi es un personaje con el que Piglia se permite todo tipo de juegos —siguió su agente literario—. Emilio Renzi es probablemente la persona que más sabe de Piglia. Más incluso que el propio Piglia».

Y lo que vendrá

Como la enfermedad «solo le afecta al cuerpo», confirman sus amigos, el futuro del argentino parece que será tan creativo como su pasado. «Los diarios de Emilio Renzi» se irán publicando por partes en los próximos dos años y este otoño aparecerá «La forma inicial», donde reivindica entre otras cosas la importancia de publicar solo cuando merezca la pena:

«Sabemos que se publica más de lo que se escribe. ¿Por qué tengo yo que obedecer a una lógica que dice que si no publicas una novela por año no estás presente? Me dicen: te van a olvidar. Mejor, que me olviden. ¿Para qué quiero que me recuerden como una especie de sello que cada vez que sale una novela mía ya saben lo que es?». Piglia no estuvo ayer por causa de fuerza mayor, pero su prosa siempre llegará a tiempo. A su ritmo, pero a tiempo.