Foto de los cuatro artistas de «Return Flight Tickets» antes de comenzar su residencia en un avión
Foto de los cuatro artistas de «Return Flight Tickets» antes de comenzar su residencia en un avión - N. Ubieto (facebook)
ARTE

Espacios artísticos que no descansan en vacaciones

ABC Cultural cuelga el cartel de «cerrado por vacaciones» hasta septiembre, pero no así un sinnúmero de espacios artísticos que incluso programan de forma especial en agosto. He aquí una selección de los más destacados de nuestro país

MADRID Actualizado: Guardar
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  1. Arte, pero también música y teatro

    Montaje de Mercedes Lara para «Apartes» (Festival de Almagro)
    Montaje de Mercedes Lara para «Apartes» (Festival de Almagro)

    Parece que no podemos dar por iniciada la temporada estival hasta que no comienza una nueva edición de La Mar de Músicas. La de 2017 está dedicada a Latinoamérica, y de la creación del subcontinente se nutre la programación artística del festival cartagenero, un aliciente a su cartel de conciertos. Como en otras entregas, el grueso del conjunto de exposiciones que salpican la ciudad lleva la firma de Carolina Parra y Nacho Ruiz. Ellos son los comisarios de «Ilumina nuestra frontera», la muestra más ambiciosa de las organizadas este año. Una aproximación al arte latinoamericano que tiene en cuenta la imposibilidad de entenderlo como unidad y, por lo mismo, de abarcarlo en su totalidad. Por ello, sus responsables prefieren trasladarse a sus fricciones, a sus bordes, a la frontera del título, tomado de uno de los artistas convocados, el mexicano Felipe Ehrenberg, recientemente fallecido. A su lado, creadores de primer nivel, en el Palacio Consistorial, como Vik Muniz, Tania Bruguera, Waltercio Caldas, Liliana Porter...

    Por su parte, la sala del antiguo CIM muestra el seguimiento fotográfico que Juan Manuel Díaz Burgos realizó de los últimos días de Fidel Castro, de su muerte a su sepultura. Otro fotoperiodista, José Luis Vidal Coy, se mueve en los mismos términos pero desde la ficción, recreando los escenarios de la novela «Los detectives salvajes», de Roberto Bolaño. Por último, Nadin Ospina reflexiona sobre la inmigración ilegal en el Palacio de Molina con su intervención «La Balsa». Y Alexandre Arrechea, y Liliana Maresca... Hasta el 31 de agosto.

    Y como no solo de música vive el hombre, el teatro se alía con la creación contemporánea este año en el Festival de Almagro, gracias al programa «Apartes», que comisaría Jorge Díez con el apoyo de AC/E. Cinco espacios emblemáticos –el Pradillo de Santo Domingo (Alicia Martín), la iglesia de San Blas ( Mercedes Lara), el Palacio de los Fúcares (Dionisio Cañas), la Antigua Universidad Renacentista (Juan López) y el Espacio de Arte Contemporáneo (Pepe Butriago)– para cinco artistas que reflexionan con aportaciones específicas sobre lo textual (tan necesario en el teatro) y los conceptos que le son propios al Barroco. Hasta el 27 de agosto.

  2. Campamentos de verano

    Intervención de Salim Malla en «Néxodos»
    Intervención de Salim Malla en «Néxodos»

    Las vacaciones estivales son para muchos sinónimo de «vuelta al pueblo», o lo que es lo mismo «vuelta a lo rural». Eso propone «Néxodos», una iniciativa que nace este año de la mano de su coordinador, Gerardo López, que convierte desde este fin de semana y hasta final de mes la pequeña localidad asturiana de San Román de Candamo en hervidero de artistas y gestores culturales, que se aprovechan del entorno agrario para estirar al máximo su creatividad. La sede del proyecto será un emblemático edificio indiano del XIX abandonado desde hace diez años y que ahora se recupera para que en él integren su trabajo creadores como Tania Blanco, Salim Malla, Ignacio Gil o Avelino Sala, entre otros, que reflexionarán con sus obras sobre la relación entre memoria y territorio. Pero también será escenario para dos talleres (el de Virginia Díez sobre inmigración o el de Cristina Urdiales sobre reciclaje), así como ámbito de presentación de iniciativas similares ( La PACA y Open Lands en Asturias; La Cabra se Echa al Monte, de Palencia, y Cerro Gallinero, de Ávila), de conciertos y de exhibición de documentales.

    Más curtida en estas lides, la localidad de no más de 500 habitantes de Genalguacil, en Málaga, que en los años pares celebra desde 1994 sus encuentros de arte y que en los impares mantiene viva su llama con el «Festival Arte Vivo» (en este 2017, del 5 al 13 de agosto), que invita a diferentes creadores a intervenir en el pueblo. Los convocados esta vez por el comisario Juan Francisco Rueda serán Arancha Goyeneche y Fernando Renes. «Pintar imaginarios» es una exposición con su trabajo reciente en el museo de la localidad (del 5 de agosto al 23 de septiembre), que crecerá de su interacción con los vecinos del pueblo y su patrimonio arquitectónico, dando pie a piezas nuevas que pasarán a la colección local.

    Por último, una marcianada divertida. La residencia más corta de la historia: la que Nerea Ubieto propuso a cuatro artistas (los estonios Flo Kasearu y Jaan Tomik y los finlandeses Nestori Syrjälä y Anna Estarriola) en un vuelo de ida a Madrid. Los resultados, hasta el 26 de julio, en la exposición «Return Flight Tickets», en la galería Max Estrella, de Madrid.

  3. Propuestas de los novatos

    Uno de los vídeos de Adrián Melis en la Fundación Cerezales
    Uno de los vídeos de Adrián Melis en la Fundación Cerezales

    La temporada que ahora acabamos nos ha dejado hasta cuatro nuevos espacios artísticos a lo largo y ancho de todo el país, dispuestos a plantar cara a aquellos con una trayectoria más dilatada. El primero en llegar, casi en Navidades, fue el C3A de Córdoba, tras años de retraso y sin director. A ese cargo accedió más tarde Álvaro Rodríguez Fominaya, que no pudo inaugurar las muestras de Falke Pisano y Nicoline van Harskamp con las que se presentó el centro, pero que ya sí ha estado presente en la recuperación del proyecto de Isidoro Valcárcel Medina con el que este espacio invita a los valientes a acercarse a la ciudad andaluza en agosto.

    Se trata de «Doce ejercicios de medición sobre la ciudad de Córdoba», realizados por el Premio Nacional de Artes Plásticas en 1974 y que, más de cuarenta años después, rezuman frescura, mientras constatan lo mucho o lo poco que hemos cambiado: anotaciones sobre monumentos a visitar en la ciudad en el caso de sólo tener tiempo para ver uno; nombres propios empleados por un guía turístico; número de naranjos en las calles; tamaño de los cuadros de sus museos... El artista murciano en estado puro.

    Ya en primavera llegaba la Fundación Cerezales Antonino y Cinia, que más que abrir por primera vez sus puertas mostraba los resultados de una mudanza a sus nuevas instalaciones, las que llevan la firma de los arquitectos Alejandro Zaera-Polo y Maider Llaguno. Hamish Fulton fue el primer artista en ocuparlas. El británico cede ahora el testigo al cubano Adrián Melis, que desde el 6 de agosto llevará allí la muestra titulada El silencio absoluto no existe, un guiño a John Cage (que afirmaba que el silencio es inexistente) y a sus inquietudes sobre la productividad del trabajo.

    En el tiempo de descuento y casi a la par hicieron las presentaciones el Centro Botín (Santander) y Bombas Gens (Valencia). El primero invita a disfrutar con el impresionante edificio de Renzo Piano, parte de la Colección Botín y con un proyecto específico de Carsten Höller. En el segundo, son bazas Bleda y Rosa y la colectiva –también con los fondos que viene a albergar– «¿Ornamento = Delito?».

  4. Soplar velas, a pesar de los calores

    «Piedad», de Juan de Vitoria, de la colectiva «Signum»
    «Piedad», de Juan de Vitoria, de la colectiva «Signum»

    No hay año que no tenga sus aniversarios. Este 2017, sin ir más lejos, es Año Jubilar en Caravaca de la Cruz, lo que se ha convertido en excusa perfecta para armar la exposición «Signum. La gloria del Renacimiento en el Reino de Murcia», inaugurada esta semana en la antigua iglesia de la Compañía de Jesús y que cerrará sus puertas en diciembre. En ella se muestra una selección de más de sesenta obras entre pinturas, esculturas, bordados, fragmentos arquitectónicos y libros pertenecientes a uno de los grandes momentos del arte español del siglo XVI.

    Entre las piezas destacadas se encuentran tres que ven la luz por vez primera: dos gárgolas y el brocal del pozo del castillo de Vélez Blanco, cuyo patio fue expoliado y cedido más tarde al Metropolitan de Nueva York, donde puede visitarse hoy. «Signum» reúne además toda la producción del pintor Hernando de Llanos que se conserva en Murcia, al tiempo que ha permitido que se restauren las «Tablas de las Historias de la Vera Cruz», atribuidas a este autor. Asimismo, redescubre la obra de Pedro Fernández, también conocido como «El Pseudobramantino», uno de los maestros más interesantes del periodo y un desconocido hasta los años noventa; aprecia la figura del pintor Jerónimo Quijano, y ofrece una panorámica de la segunda mitad de esta centuria en la que se aclaran muchos de los nombres hasta ahora sin obra asignable.

    También Foto Colectania, en Barcelona, cumplió en primavera 15 años, que celebró con nuevo edificio en el Paseo Picasso. Estas semanas puede visitarse allí su segunda cita de esta segunda etapa, dedicada al cronista del Nueva York más oscuro de los años 30 del siglo XX:el fotógrafo Weegee.

    Veinte años de Guggenheim en Bilbao, donde son parada obligada Bill Viola y George Baselitz. Y veinticinco del Thyssen en Madrid. Buena excusa para visitar sus revisiones del Renacimiento veneciano y de Sonia Delaunay que ahora tiene en cartel. En esa misma ciudad no olviden las sedes de CentroCentro y Conde Duque de «El porvenir de la Revuelta», con motivo del 40 aniversario de los primeros logros del colectivo LGTB español.

  5. Lugares en los que siempre es verano

    Fotografía del colectivo AES + F (Es Baluard)
    Fotografía del colectivo AES + F (Es Baluard)

    Aquellos lugares que asociamos mentalmente con destinos vacacionales son conscientes de este resorte emocional nuestro y programan citas especiales para hacer sus ganancias en el río revuelto del turisteo que les llega por oleadas estos días. Es el caso de Palma de Mallorca, donde Es Baluard, además de analizar el fenómeno en «Ciudad de vacaciones» (hasta el 22 de octubre), ofrece por el mismo precio en el Aljibe el proyecto «The Feast of Trimalchio» del colectivo ruso AES + F (hasta el 17 de septiembre). O Marbella, localidad desde hace ya dos años (esta será su tercera edición) ligada a la feria con la que el sector cierra la temporada. El próximo viernes y hasta el 2 de agosto, una nueva convocatoria de Art Marbella reunirá cerca de 50 galerías internacionales en el Palacio de Congresos. Un salón que crece y que en septiembre ofrecerá una segunda plataforma especializada en diseño (del 6 al 10).

    También son ciudades de playa Barcelona, Valencia y Málaga. La primera acaba de inaugurar en CaixaFórum una intensa retrospectiva sobre Giorgio de Chirico. Pero merecerá también la pena acercarse a La Virreina para disfrutar del proyecto «La balada de Simón», del argentino Gonzalo Elvira, que vuelve a abordar episodios más o menos velados de la Historia colectiva desde su particular mirada;o a la Fundación Miró, para disfrutar del homenaje que algunos creadores actuales hacen, treinta años después, a «The Way Things Do», filme canónico del dúo suizo Fischili &Weiss (que curiosamente aterriza en el CACMálaga).

    En la capital del Turia contamos desde este momento con todo un año para imbuirnos en un capítulo más de la colección del IVAM, centrado ahora en el arte abstracto. Pero ya sabemos que el tiempo pasa luego muy deprisa. Por último, en la ciudad de la Costa del Sol, el Museo de Arte Ruso se suele esperar a que entre agosto para deleitarnos con una joya. Este año lleva el nombre propio de Alexej Jawlensky, amigo personal de Kandinsky (desde el 8 de agosto), por él influido.

    En Canarias, visita obligada a la «Anatomía de lo leve» del CAAM, reflexión sobre la superficialidad de la sociedad actual de la mano de Esther Aldaz, Antonio Díaz Grande, Zuhar Iruretagoiena y Tito Pérez Mora.

  6. Más allá de lo evidente

    Obra de Ignacio Llamas para «Sangrar la luez», en Toledo
    Obra de Ignacio Llamas para «Sangrar la luez», en Toledo

    Hay tantos lugares de reposo como personas dispuestas a desconectar estas semanas. Destinos que, solo por eso, hacen las delicias de quienes los alcanzan. Y en todos ellos habrá siempre un proyecto artístico cercano esperando. Es el caso de Toledo, en cuyo Museo de Santa Cruz introduce Ignacio Llamas algunas de sus piezas recientes conformando con ellas una coreografía de luces, sombras y sonidos que le viene que ni al pelo a este escenario. Esa es la filosofía de la muestra «Sangrar luz», en la estela mística de su autor, cuya comisaria es Cristina Fontaneda (penúltima directora de Patio Herreriano, centro de la capital vallisoletana donde nos esperan Dalí, Esteban Vicente, el joven Luis Vassallo...). La muestra permanecerá abierta hasta el 26 de noviembre.

    En Lérida, La Panera se alía con Ignasi Aballí, Ignacio Uriarte, Belén Uriel y Miquel Mont en la colectiva «Llueve, nieva, pinta», una aproximación a la pintura expandida, que se complementa bien con otros proyectos en este centro de Carles Congost, Enric Farrés Duran o el equipo de diseño Lo Siento. Y en el CGAC de Santiago de Compostela, ciudad de acogida de miles de peregrinos todos los años, recala ahora la retrospectiva que el CAAC dedicó a Luis Gordillo: «Confesión general». Si no la vieron entonces, concédanse ahora la oportunidad.

    Por último, parémonos en Bilbao y en el Museo de Bellas Artes de esta ciudad. Allí nos espera una muestra rodeada de expectación. De un lado, porque es con la que se estrena Miguel Zugaza como director del centro (al que vuelve tras su laureado paso por el Museo del Prado). Del otro, porque muestra por vez primera (salvo una pequeña incursión más reducida en el Musée Jacquemart-André de París) parte de la colección de la empresaria Alicia Koplowitz (Grupo Omega Capital), un conjunto que repasa la Historia del Arte Occidental aunque cuenta con la pintura de los siglos XVIII y XXcomo sus platos fuertes. Las casi 90 obras seleccionadas (un suspiro), de Pantoja de la Cruz a Kiefer, su adquisición más reciente, la ilustran con precisión.

    Citas, todas que invitan a quedarse allí y no volver en septiembre.

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