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¿Volver a pescar en Zorrilla?

En el club vallisoletano quieren dar salida a jugadores interesantes y el Cádiz podría repetir la fórmula de hace un invierno

Alarcón sigue sonando

Los jugadores del Real Valladolid celebran un tanto RVLLDLD

P.V.

La temporada pasada el Cádiz logró el objetivo de la permanencia gracias al gran mercado de invierno que realizó, donde incorporó a los jugadores necesarios para subir el nivel de la plantilla y acercarlo a una lucha más igualitaria por la salvación. El plan salió a la perfección, pero el riesgo existe porque no se puede fallar en los movimientos. Rendimiento inmediato y un perfil de futbolista contrastado son los ingredientes principales y la entidad amarilla se topó con ellos en Pucela.

Porque, además de la llegada de Sergio González , cuya última experiencia fue en el José Zorrilla, el Cádiz ‘rescató’ a Fede San Emeterio y Rubén Alcaraz. Ambos jugadores, de forma automática, se convirtieron en piezas fundamentales para reconocer la metodología de Sergio González y su aplicación sobre el terreno de juego. Pasaron de no contar con minutos en Segunda División – Pacheta prefería a Aguado y Roque Mesa – a ser totalmente intocables en la medular de un equipo de Primera.

Cántabro y catalán respondieron a la perfección y, de paso, acallaron ciertos comentarios negativos sobre sus respectivos niveles de juego que llegaban desde la capital vallisoletana. El resultado final ya lo saben. Los amarillos se quedaron en la máxima categoría y los blanquivioletas retornaron a la misma. Éxito repartido y una fórmula que se podría repetir esta campaña.

Desde el Real Valladolid están trabajando, como debe ser, en los retoques necesarios de cara a la próxima ventana de traspasos. Y eso implica dar salida a ciertos efectivos. Tal y como informa el periodista Ignacio Bailador desde el diario AS, el club pucelano quiere encontrar la mejor solución para deshacerse de Sergi Guardiola, Juanjo Narváez y Michael Malsa.

El ariete manacorí está bajando progresivamente sus prestaciones a medida que avanza el campeonato y aún no ha logrado anotar un tanto en los once partidos que ha disputado. Además, erró una pena máxima en la jornada 4 ante el Almería y para Pacheta delanteros como Weissman o Sergio León están por delante. Caso parecido es el de Juanjo Narváez, que ha jugado mucho menos que Guardiola (146 minutos repartidos en cinco choques y ninguna diana) y presenta una trayectoria mucho más humilde en la élite que la de su compañero. Tras dos campañas muy buenas en el Real Zaragoza y en la UD Las Palmas el futbolista colombiano no ha sido capaz de recuperar su mejor nivel.

En el caso de Michael Malsa, el futbolista francés de ascendencia martiniqués no ha contado en absoluto para el técnico y es el propio futbolista, que no ha tenido fortuna con las lesiones, el que quiere salir para gozar de continuidad. El Cádiz sondeó al centrocampista hace dos años, cuando afrontaba la segunda vuelta tras su regreso a Primera, pero no se hizo con sus servicios. Cuenta con muy buen cartel en Segunda División, aunque no sería extraño que recalara en algún club de la máxima categoría.

El mercado de invierno se acerca mientras el Mundial de Catar finalizan, y el Cádiz necesita reforzarse sí o sí. De las opciones que ofrece el Real Valladolid, las de Malsa y Sergi Guardiola son las que más parecen convencer, aunque ninguno de los dos asegura un rendimiento inmediato y, sobre todo, diferencial. Aún así, Pucela es una plaza de la que siempre hay que estar pendiente.

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