CÁDIZ

La subida de los precios obliga a los propietarios a buscar amarres en Portugal

Las instalaciones recreativas de la provincia realizan ofertas atractivas a sus clientes y hablan de un auge de gangas en el mercado de compra-venta

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La subida de precios que la Agencia Pública de Puertos de Andalucía ha aplicado en sus tarifas de atraque a comienzos de este año 2014 está obligando a muchos propietarios de embarcaciones, que hasta ahora tenían como puerto base alguna de estas instalaciones en la provincia, a buscar nuevo refugio, más económico aunque también más lejano.

Según Rafael Vázquez, presidente del Club Náutico Sancti Petri, Portugal está siendo el destino más demandado por muchos patrones, que no pueden afrontar pagos «de hasta 400 y 500 euros mensuales por barco». Y es que para muchos propietarios de embarcaciones de Cádiz, Sevilla y Huelva, resulta más económico trasladarse hasta puertos de pueblos del país vecino, sobre todo aquellos que están más cerca de la frontera con Ayamonte, que mantener un amarre en su provincia de residencia.

Los datos no engañan. Los puertos deportivos privados gaditanos son hasta un tercio más económicos que los que gestiona la APPA. Y las consecuencias son inmediatas. En estos últimos, es posible ver numerosos huecos y la ocupación se ha ido reduciendo paulatinamente en los últimos años, siendo mucho más acusada en lo que va de 2014.

Según las estadísticas de la Agencia Pública, en zonas portuarias como Sancti Petri se ha reducido hasta un 4% la ocupación de sus pantalanes. Algo parecido ha sucedido en Chipiona o Rota entre enero y julio pasados, con un dato muy negativo en el caso de Puerto América o Barbate, donde la ocupación ha llegado a bajar en más de un 11%.

Esa marcha de embarcaciones de los puertos públicos está suponiendo una oportunidad de negocio para los clubes que regentan instalaciones similares en la provincia. En el caso de Sancti Petri, son 120 los amarres disponibles, pero en estos momentos hay más de 170 barcos atracados en la zona. Esa cifra responde al crecimiento de los barcos 'transeúntes' que fondean por días o temporadas durante el verano.

En otro de los referentes de la náutica gaditana, Puerto Sherry, la situación es similar. El capitán de puerto portuense, Francisco Colón, explica que en sus instalaciones también se nota la crisis, sobre todo en el incremento del mercado de compra-venta de embarcaciones. «Notamos que muchos barcos se van de Cádiz porque sus propietarios los venden en otros puntos de España y también notamos que llegan barcos comprados fuera», explica Colón.

Puerto Sherry aplica un sistema de cobro en las cuotas de atraque bastante reglado, y «en cuanto detectamos dejación o olvido del pago de la cuota, se actúa iniciando la comunicación con el propietario», explican. En estos momentos en Puerto Sherry hay disponibles 842 amarres, y su ocupación media durante todo el año oscila del 65% al 70%.

Ellos se empeñan en ser competitivos y atraer mediante ofertas a nuevos clientes y sus barcos. De hecho, ofrecen descuentos y packs combinados de amarre y estancia en varadero, que permiten al cliente ahorrarse unos euros si deciden sacar el barco del agua. La tipología más habitual en la marina portuense es de barcos de 8 a 12 metros, cuyo amarre cuesta al año 3.000 euros + IVA.

Y es que en esta época, los puertos deportivos de Cádiz también notan la crisis. Cada día son más los propietarios que «no pueden permitirse gastarse 100, 200 o 300 euros en gasoil para mover el barco y salir a pescar o pasear, mantener el seguro y mantenerlo», explican.