La concesión de hipotecas se derrumba un 41% hasta su nivel más bajo desde 2003

El mercado inmobiliario no levanta cabeza, ni por el lado de la oferta ni por el de la demanda. Los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) no dejan margen para las dudas. En agosto -última información disponible-, el número de hipotecas sobre viviendas cayó un 41,7% sobre doce meses atrás, con apenas 30.000 operaciones. Se trata del nivel más bajo desde 2003. El dinero prestado en esos créditos apenas sumó 3.125 millones de euros, lo que representa un retroceso interanual del 49,1%.

Con esos mimbres, la hipoteca media se quedó en 106.922 euros, un 12,6% menos que en agosto de 2010 y un 3,3% menos que en julio. La construcción sufre también, y en el segundo trimestre se iniciaron 13.679 pisos en el mercado libre, lo que supone un descenso del 11,7% con respecto al periodo enero-abril y del 24% en términos interanuales.

Cada día se dan menos créditos, por menos dinero de media y bajo unas condiciones cada vez más estrictas. No ya la compra de una casa, sino la concesión de una hipoteca se ha convertido en una quimera. Y los bancos y las cajas limitan casi en exclusiva las operaciones de financiación a aquellas con las reducen su propio 'stock', mientras el mercado 'normal' permanece seco. La desconfianza y la permanente sensación de que la crisis se agudiza unida a una eventual vuelta de tuerca a las exigencias de capital de primera calidad de las entidades están dando la puntilla al negocio. Mientras la actividad se apaga, la morosidad en los préstamos para pisos se sitúa en el 2,5%.