CONFLICTO LABORAL
El SEPE no abona el paro a los trabajadores despedidos del comedor de Camposoto
Dulcinea Nutrición, sociedad encargada de sus contratos, no presentó los certificados de empresa «con pleno conocimiento» de la situación de estos afectados
El viernes 13 de diciembre los 17 trabajadores de Dulcinea Nutrición S.L. encargados de prestar servicio de comedor al acuartelamiento del Ejército de Tierra en Camposoto recibían «con asombro e incredulidad», según cuentan, la notificación definitiva de despido de la Seguridad Social. Un hecho que, de la misma manera, afectaba a los encargados del servicio de comedor de las instalaciones militares de Adalides (Algeciras), Charco Redondo (Los Barrios), Campamento (San Roque) y Camarinal-Bujeo (Tarifa), también bajo contratos subrogados a dicha empresa.
Ese mismo día, los trabajadores afectados se dirigieron a las oficinas del Servicio Público de Empleo (SEPE) de San Fernando a sellar sus respectivos Documentos de Alta y Renovación de la Demanda de Empleo (DARDE). «Hicimos todas las gestiones y acreditamos toda la información que nos pidieron en el paro», justifica Cristina Castilla, empleada civil fija en el acuartelamiento de Camposoto desde hace más de 20 años y representante del resto de compañeros. Desde ese momento, quedaron a la espera de que se entregase, por parte de Dulcinea, los certificados de empresa que debían ser enviados al SEPE con independencia, según costa en la página oficial de este organismo, de que se formule o no solicitud de prestación por desempleo y de que ésta sea, o no, denegada por estar en situación ilegal de desempleo.
Han denunciado a la Inspección de Trabajo
El lunes 23 de diciembre, desde el SEPE comunican a los trabajadores que los documentos que tenían que ser enviados por la compañia Dulcinea Nutrición S.L. no han llegado, haciendo hincapié en la urgencia de que aparezcan antes del día 28, momento en el que se «cerraban las nóminas», cuenta Cristina. Ese mismo día, siguiendo con las recomendaciones recibidas por parte del SEPE, los empleados afectados pusieron una denuncia en el juzgado de guardia de Inspección de Trabajo reclamando sus certificados de empresa . Los abogados de los trabajadores pidieron a sus clientes que acudiesen a la Seguridad Social para averiguar cuáles eran las causas del despido argumentadas por la empresa. Para sorpresa de ellos, supieron que el motivo que figura en las alegaciones de sus despidos es por «otras causas», comodín que se suele dar para justificar las liquidaciones de contratos.
Los perjudicados volvieron a acudir a las oficinas del SEPE el jueves 26 y el viernes 27 de diciembre, día en el que les comunicaron definitivamente que no iban a «cobrar en enero porque los certificados no estaban» dice Cristina. Ella fue la encargada de tratar de ponerse en contacto con la empresa que poseía los contratos de los trabajadores del catering. «A fuerza de muchos intentos», relata Cristina, logró comunicarse, por vía telefónica, con Vanessa Mancebo, product manager en Dulcinea Nutrición S.L., quien alegó, tal y como cuenta Cristina, que los trabajadores se encuentran de baja «porque Dulcinea no ha podido renovar su contrato con Defensa» por sus deudas con la Seguridad Social. Asimismo, la gerente de la empresa confirmó a los trabajadores de los comedores de los acuartelamientos que «no van a poder cobrar el paro», porque, según Dulcinea, su despido «no es culpa de la compañía», demostrando, «con pleno conocimiento», la situación de débito económico con sus empleados. «Ahora nos encontramos peor que antes, porque estamos sin cobrar y, desde ahora, sin cotizar», concluye Cristina Castilla.
Piden más implicación al Ayuntamiento
Los afectados por los despidos reclaman que Dulcinea Nutrición S.L. nunca se sentara con los trabajadores para «plantear soluciones y explicar la situación real». Al mismo tiempo, pese a que la alcaldesa de San Fernando, Patricia Cavada, ha manifestado su apoyo a los trabajadores, los empleados piden «más implicación» y que ejerza «más presión» a Margarita Robles , actual ministra de Defensa y ministra de Asuntos Exteriores en funciones, para que se puedan encontrar soluciones.
Cabe recordar que a estos 17 trabajadores, de los cuales cuatro de ellos contaban con contratos fijos con una antigüedad superior a los diez años y los otros 13 restantes eran fijos discontinuos, la empresa Dulcinea Nutrición S.L. les debe un montante que supera, según los afectados, los 30 mil euros entre mensualidades (desde agosto los empleados fijos y los fijos discontinuos desde septiembre) y pagas extraordinarias, sin incluir las indemnizaciones y las prestaciones de desempleo que reclamarán a partir del 19 de febrero, fecha en la que se iniciará el juicio en Cádiz.
Desde que se conocieran estos hechos, los afectados se han unido a las manifestaciones en las puertas del cuartel de Camposoto reclamando una solución que, de momento, no llega a la espera de la resolución judicial. De momento, este colectivo no tiene previsto hacer más movilizaciones para denunciar su situación, a la espera de que pasen los días de festividad de esta época.
