CRISIS DEL CORONAVIRUS
El turismo rural gaditano aguarda con optimismo un verano marcado por la movilidad interprovincial
El sector prepara ofertas y campañas especiales de cara a la temporada estival para sobreponerse a la crisis del coronavirus
La crisis del coronavirus ha alterado la vida de prácticamente la totalidad de la población gaditana de alguna u otra forma. Las medidas excepcionales de seguridad e higiene a las que nos tendremos que acostumbrar en los próximos meses, las restricciones de movilidad, el cierre de las fronteras han originado una gran incertidumbre en un sector turístico que es de vital importancia para la economía de la provincia de Cádiz.
A día de hoy, resulta complicado vislumbrar unas vacaciones fuera de de nuestro país e incluso más allá de cada comunidad autónoma. Por ello, el turismo rural y de cercanía se antoja como una alternativa segura de cara al periodo estival para disfrutar de unos días de desconexión alejado de las aglomeraciones de gente que pueden darse en la costa.
Las casas y alojamientos rurales de Cádiz son las primeras que están reactivando su actividad en este Plan de Desescalada hacia la denominada 'nueva normalidad'. Estos alojamientos ya están recibiendo sus primeras reservas de cara a las próximas semanas, aunque aguardan con optimismo al permiso para poder viajar entre provincias para recuperar cierto nivel de negocio.
«Ahora mismo puede haber en torno a un 10% del total de los alojamientos turísticos de la Sierra de Cádiz abiertos. Todavía no hay movilidad interprovincial y eso nos castiga mucho porque buena parte de nuestros clientes proceden de provincias como Sevilla o Málaga», explica Juan Carlos Tamayo, vicepresidente de Asociación de Turismo Rural CIT Sierra de Cádiz .
«De aquí a un mes esperamos que entorno al 70 u 80% de los alojamientos ya se encuentren abiertos», ha señalado Tamayo, quién regenta también el Hotel del Carmen en Prado del Rey. Precisamente este empresario ha decidido no abrir su establecimiento hasta el próximo mes de junio, aunque ya organiza su reapertura con todas las medidas de seguridad e higiene y una bajada en los precios.
Los propietarios y gerentes de estos alojamientos de turismo rural de Cádiz ya trabajan en ofertas y descuentos especiales de cara a la temporada de verano para intentar atraer a un cliente que, previsiblemente, va a optar más por este tipo de turismo alternativo al sol y playa.
«Va ser inevitable llevar a cabo una bajada en los precios. Mantener las tarifas de años anteriores se antoja complicado . En cuestión de un mes se van a poner a la venta miles de plazas de alojamiento, y cada uno implementará políticas de descuento para captar al cliente», explica el representante del CIT Sierra de Cádiz.
Pese a todo, Tamayo confía en que el sector no entre en una 'guerra de precios': « Nuestra estratégia va a ser hacer ofertas y paquetes turísticos . Bajar un poco el precio si se alarga la estancia, por ejemplo. Espero que no se bajen demasiado los precios porque si no entraremos en una guerra que al final no es rentable para nadie. A veces cometemos el error de que por tener buenos números en la ocupación no miramos el beneficio».
Incertidumbre por la respuesta del cliente
El turismo rural gaditano aguarda con incertidumbre cómo pueda responder el cliente en esta nueva normalidad en la que habrá que aprender a convivir con el Covid-19 hasta que no se desarrolle una vacuna. «Se están empezando a recibir las primeras reservas. Entre el cliente se ve que hay ganas y que tiene intención de moverse . Esto es algo nuevo para todo el mundo, tendremos que ir adaptándonos también a lo que el cliente vaya pidiendo».
En la misma línea se expresa Fernanda Brandy, propietaria del alojamiento rural Aires de la Sierra en la localidad de Benaocaz. Este alojamiento reabrió al público con el inicio de la Fase 1 y desde entonces, no ha dejado de recibir un goteo constante de reservas. En este caso, la mayoría de los clientes son para disfrutar de una desconexión inmediata.
«Las reservas que estamos recibiendo son de un día para otro. Los clientes llaman hoy para mañana o pasado mañana . La gente que hemos tenido por ahora son personas que no han parado de trabajar durante estos meses y que necesita desconectar y descansar», explica.
La propietaria de este alojamiento también prevé el lanzamiento de ofertas y campañas de descuento especiales: «Seguramente lancemos de cara al verano descuentos y promociones. De momento a la gente que está viniendo ya les estamos ofreciendo mejores precios que antes del coronavirus . Estamos siendo cautos porque todavía llevamos sólo una semana abiertos».
Brandy coincide en que los desplazamientos entre provincias será clave para este sector en la Sierra de Cádiz: « Estamos esperando la movilidad interprovincial . Eso va a ser fundamental porque nuestra clientela es en su gran mayoría española y al 80% andaluza de otras provincias como Málaga y Sevilla».
Mª Concepción Ramírez es la propietaria de tres casas rurales en Grazalema, dos dentro del propio municipio y una en el campo. «La Casa Rural La Bodega, que es la que está en mitad del parque natural, se encuentra al completo para los meses de julio y agosto . La gente está buscando ahora desconexión y piscina».
«En los alojamientos del pueblo está la cosa más parada. Las reservas que teníamos se han anulado todo porque la mayoría era gente de otros países », sentencia.
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