CORONAVIRUS
Así es el protocolo anti-Covid en el extranjero de los barcos de la Armada
Las dotaciones tienen prohibido desembarcar en los puertos, por eso, los miembros de la fragata 'Reina Sofía' pasarán cinco meses sin tocar tierra y los del Juan Sebastián de Elcano, once
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Una isla sin Covid en mitad del mar. Eso son los barcos de la Armada Española desplegados en el exterior. Un positivo a bordo puede dar al traste con toda una misión, por eso, los buques miliares se blindan ante el coronavirus . Dos de los barcos españoles desplegados en el exterior tienen su base en Cádiz, el buque escuela Juan Sebastián de Elcano, en La Carraca, y la fragata 'Reina Sofía', en Rota.
Ya se lo advirtió el Almirante de la Flota, Antonio Martorell, a la dotación del buque escuela Juan Sebastián de Elcano justo antes de que empezase su 93º crucero de instrucción, el pasado 24 de agosto, «este crucero constituye uno de los hitos más importantes en la conmemoración de la circunnavegación a la Tierra que culminó Juan Sebastián de Elcano». Un crucero «marcado por la incertidumbre que genera el Covid», por lo que las autoridades de la Armada están «permanentemente» atentas a la evolución del coronavirus «para tomar las decisiones que sean las más acertadas». Y recordó a los 172 miembros de la dotación que las medidas anti Covid en la llegada a puerto implican «restricciones al movimiento en los miembros de la dotación al llegar a puerto y también restricciones al acceso de personal ajeno». Prohibiciones que tildó de «muy duras» y más teniendo en cuenta que el crucero es también la undécima vuelta al mundo del buque y durará once meses, pero «imprescindibles para garantizar vuestra seguridad». « Tenéis que mantener el buque limpio a toda costa . Un solo caso Covid a bordo, a parte de las implicaciones para la salud del afectado, puede dar al traste con todo el crucero», subrayó el almirante Martorell.
El crucero del Elcano, marcado por la pandemia
Actualmente, detallan desde el barco a este periódico, el buque escuela Juan Sebastián de Elcano «sigue estrictamente todos los procedimientos y protocolos sanitarios establecidos por el Ministerio de Sanidad y el Instituto de Medicina Preventiva de la Defensa para garantizar una atmósfera libre de Covid-19 a bordo». No obstante, este barco ya se preparó antes de iniciar el viaje porque durante su alistamiento la dotación pasó una cuarentena previa y dos pruebas PCR antes de embarcar (algo que también hacen los relevos).
«Las autoridades de la Armada», explican, « en función de la evolución de la pandemia, tomarán las decisiones oportunas sobre la continuación del crucero de instrucción que contempla dar la vuelta al mundo y sobre las escalas en los diferentes puertos. La prioridad de esta decisión será garantizar la seguridad sanitaria de la dotación y se tendrá en cuenta los Informes de Inteligencia Sanitaria emitidos por el Instituto de Medicina Preventiva del Hospital Gomez Ulla, que es el órgano competente en el ámbito de las Fuerzas Armadas para valorar el riesgo sanitario».
Ahora, para mantener al buque como un espacio libre de Covid-19, «se aplican estrictos protocolos» que «básicamente contemplan la restricción al movimiento del personal de la dotación en los puertos visitados y la prohibición de la presencia a bordo de personal ajeno a la dotación ». Cuando esta presencia es inevitable, como sucede con la obligación de embarcar prácticos para los movimientos portuarios del buque, «se extreman las medidas de seguridad manteniendo una distancia de seguridad y el uso de mascarillas».
Por otro lado, respecto a las necesidades logísticas del Elcano como el embarque de víveres y combustible, que debe llevar a cabo en los puertos en los que hace escala, ambas actividades, detallan, «se realizan siguiendo los procedimientos sanitarios y evitando interactuar con los agentes logísticos que los suministran. En el caso de los víveres, estos se dejan a pie de muelle por parte de la empresa y posteriormente el personal de la dotación los recoge sin necesidad de tener contacto con los diferentes agentes».
En estos momentos el buque escuela Juan Sebastián de Elcano navega por el océano Pacífico, rumbo a la ciudad chilena de Talcahuano, a donde arribará el próximo 4 de noviembre.
Deporte en el muelle
Muy lejos, navegando en el océano Índico desplegada en la operación 'Atalanta' de lucha contra la piratería, se encuentra la fragata 'Reina Sofía' . Desde allí detallan a este periódico que durante todo su depliegue han llevado a cabo las medidas anti-Covid que los buques de la Armada están tomando en puerto y que «tienen como objetivo mantener el buque como 'Covid-Free', no rompiendo la denominada "burbuja", para evitar contagios».
Así pues, al igual que en el caso del Elcano, « no están permitidas las salidas a tierra por parte de la dotación y las visitas a bordo son muy restringidas y llevando a cabo unas estrictas medidas anti-Covid».
Además, para que las dotaciones «puedan hacer ejercicio físico y bajar del buque a tener algo de esparcimiento, en la zona del muelle donde está atracado el buque se habilita un espacio reservado para la dotación ». Y, por último, «los palés y contenedores de víveres se desinfectan antes de meterlos a bordo, así como cualquier otro material logístico que se recibe». Máximo cuidado para mantener a salvo de coronavirus estas «burbujas» y poder regresar a casa sanos y salvos y con la misión cumplida.
