Detenido Carlos Carretero en una operación contra el tráfico de marihuana en la Sierra de Cádiz

Carlos Carretero, el exjefe de la Policía Local de Ubrique, que saltó a la luz pública tras haber estado implicado en la 'operación Karlos', y por la que fue a prisión por estafar a la Seguridad Social, ha sido detenido este martes en el marco de una operación, bautizada como 'Cobradiezmo' contra el tráfico de drogas cuya explotación está desarrollando la Guardia Civil en varias localidades de la provincia de Cádiz.

Carretero ha sido arrestado aunque, de momento, no han transcendido más datos de cuál sería su implicación en esta investigación.

Según ha podido saber este periódico, el operativo, en el que participan numerosos agentes de la OCON Sur y de la Comandancia de Cádiz, se dirige contra una red dedicada supuestamente al tráfico de estupefacientes, especialmente a los cultivos de marihuana y a su distribución por la península. La red se dedicaría a «acumular grandes cantidades de marihuana para su venta al por mayor en distintas localidades del norte de España, así como en distintos países europeos», según han informado fuentes oficiales.

Además de Carretero también habría sido detenido su hijo Javier y al menos otra veintena de personas más. Los arrestos se han producido en Bornos, Arcos y Jerez.

Se están llevando a cabo una quincena de registros domiciliarios. Los detenidos están siendo trasladados a dependencias de la Guardia Civil de Cádiz a la espera de pasar a disposición judicial.

La operación está de momento bajo secreto de sumario.

Carlos Carretero se hizo especialmente conocido a nivel nacional -incluso llegó a ir a programas de corazón- por su implicación en el 'caso Karlos'. Según dictaminaron los magistrados de la Audiencia de Cádiz y, posteriormente, ratificó el Tribunal Supremo, el exjefe de la Policía de Ubrique se beneficiaba económicamente de forma ilícita consiguiendo pensiones de incapacidad laboral para terceros que no reunían las condiciones exigidas para ello. Los captaba y les pedía dinero a cambio . Para ello, contaba con la importante colaboración de un inspector médico, Francisco Casto, al que le unía una amistad, que también fue condenado a prisión por estos hechos.

Así ocurrió por ejemplo con Remedios Torres, la madre de María José Campanario, a quien su hija gestionó uno de estas incapacidades por lo que fueron ambas detenidas, juzgadas y condenadas a un año y once meses de prisión, no teniendo que entrar finalmente en la cárcel debido a que la pena era menor de los dos años. Según se concluyó, Carretero le hizo a Torres un contrato de limpiadora en una oficina de su propiedad en la que nunca llegó a trabajar.