SUCESOS | CRIMEN DE CASTRO URDIALES
Mamen, la presunta asesina de su pareja en Castro Urdiales, y sus años en Cádiz
La mujer que entregó una caja con la cabeza de su novio a una amiga tuvo marido e hijos en la capital gaditana
En la Audiencia Provincial de Cádiz no consta registrada ninguna condena por estafa contra ella
Mamen Merino , la mujer que protagoniza desde este lunes las portadas de todos los periódicos y los informativos por un suceso atroz como pocos, vivió durante años en Cádiz . La presunta asesina de Castro Urdiales que dejó a una amiga una caja que contenía la cabeza de su pareja guarda fuertes vínculos con la capital gaditana. Aquí se casó y tuvo dos hijos. Y en Cádiz también parece ser que conoció a Jesús Mari, cuyo cráneo, a falta de que se practiquen las pruebas de ADN, entregó envuelto en albal y empaquetado a su vecina . Le dijo que eran juguetes eróticos de él y que por favor se los guardara. Cuando pasados siete meses, esta mujer abrió la caja lo que encontró fue la cabeza en descomposición de este hombre, un exbanquero de 67 años, y del que nada se sabía desde hacía tiempo. El sábado, la Guardia Civil detenía a María del Carmen y este martes ha ingresado en prisión .
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María del Carmen Merino G.D. L., de 61 años, llevaba al menos siete años viviendo en la localidad cántabra de Castro Urdiales. Allí se trasladó dejando Cádiz una vez que sus hijos, un chico y una chica, se hicieron mayores y se independizaron. Por su parte, Jesús María había viajado en varias ocasiones a la provincia gaditana acompañando a un amigo y una de esas veces, según cuentan conocidos de la víctima, se cruzó a Mamen y se enamoraron. Al tiempo ella decidió irse con él para el norte .
Sin condena por estafa en Cádiz
Poco se conoce de la vida de Mamen en Cádiz ya que no transcendió de «una vida normal». Sobre la supuesta estafa cometida hacia una pareja de una familiar suya en Cádiz, fuentes consultadas apuntan que no existe , al menos que esté registrada, ninguna sentencia condenatoria al respecto contra ella .
En Castro Urdiales encontró en la Casa de Andalucía un lugar donde disfrutar de su pasión por el flamenco y a la vez integrarse y hacer amistades en su nuevo hogar. Allí, la noticia les ha dejado a todos sobrecogidos, incrédulos. «Es una mujer normal y corriente. A veces tenía episodios de depresión y tomaba medicación», cuentan al Diario Montañés .
En este centro incluso supieron de la desaparición de Jesús Mari. «Le preguntábamos qué tal estaba, cómo lo llevaba y nos decía que iba tirando y que no lo denunciaba porque la Policía le decía que esperase, así que todas la animábamos durante la ausencia de su marido», relatan.
Sin embargo, los amigos y familiares de Juan María algo sospecharon al no saber de él durante tanto tiempo. Solo noticias suyas por unos whatsapps «muy extraños» que recibieron y que se sospecha escribió quien lo asesinó.
Ella mientras siguió haciendo «vida normal». Los investigadores que ya intentaban dar con la pista del desaparecido tras la denuncia de su hermano, sí detectaron que Mamen había sacado dinero en efectivo de la cuenta de su pareja pero tampoco daban con nada definitivo para incriminarla.
Hasta que hace unos días se produjo el truculento hallazgo de la vecina. «Alguien dejó la cabeza de mi novio en la puerta. La guardé porque era el único recuerdo que tenía», dicen que fue la primera explicación que Mamen dio a la Guardia Civil sobre la funesta y lúgubre caja. La investigación continúa abierta.
