El dueño de una inmobiliaria de Cádiz, detenido por estafar a sus clientes en la venta de casas

Agentes de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional en Cádiz han detenido en la capital gaditana a un hombre de 36 años, propietario y administrador de una agencia inmobiliaria situada en la Cuesta de las Calesas por estafar presuntamente a sus clientes en la venta de viviendas .

Según ha podido saber este periódico, el investigado, D.M.S., se valía principalmente de los contratos de arras para efectuar estos engaños. De momento, se calcula que la cantidad estafada ha podido ser de 9.000 euros a tres víctimas distintas, sin embargo, la Policía sospecha que los afectados podrían haber sido muchos más por lo que el caso no está cerrado ya que esta persona, con grandes dotes persuasorias, también trabajaba como intermediario de otras agencias. Según fuentes consultadas, fue arrestado el pasado miércoles y puesto a disposición judicial.

El 'modus operandi' que empleaba era similar aunque dependía de las circunstancias. El primer engaño del que se tiene constancia lo cometió en abril del año pasado. Fue a una trabajadora de la hostelería que acudió a su agencia para comprarse un piso. Para ello y tras gustarle uno de ellos firmó el contrato de arras entregándole al detenido 3.000 euros. Sin embargo, esta mujer no pudo materializar finalmente la hipoteca debido a problemas económicos derivados de la crisis del Covid. Fue entonces cuando, según el acuerdo al que había llegado, pidió la devolución de la reserva que había hecho y tras insistir en reiteradas ocasiones, el agente solo le devolvió mil euros cuando por contrato el reembolso tenía que ser íntegro.

En otra ocasión, en el mes de junio, el agente ofreció para la compraventa a otro cliente su propia casa situada en la Avenida del Perú aunque falsificó presuntamente el contrato donde figuraba que era propiedad de otra tercera persona. Además aseguraba que estaba libre de toda carga. Así firmaron la reserva, también por 3.000 euros. Sin embargo, el comprador antes de efectuar la escritura se percató de que la vivienda sí tenía cargas y quiso romper el acuerdo por lo que pidió que le devolviera el dinero que había puesto como señal, algo que jamás se produjo. Las víctimas recibían siempre evasivas y excusas o no les llegaba a coger el teléfono. Además les amenazaba con que si iban a la Policía tomaría represalias legales contra ellos por dañar su imagen.

En un tercer caso el engaño llegó incluso hasta la notaría . En el contrato de compraventa figuraba que la vivienda en cuestión costaba 119.000 euros. El agente le pidió además 3.000 euros en efectivo en tres cheques distintos porque, supuestamente, era para tres vendedores diferentes, además del dinero de la reserva que ya se había pagado. Sin embargo los propietarios no tenían conocimiento de ese dinero que se entregaba sin factura por lo que los investigadores creen que se lo apropió exclusivamente para él al margen de su preceptiva comisión. La víctima se percató al hablar con los dueños de la casa que no tenían ni idea de ese sobrecoste en dinero negro.

Así pues, tras recabar todas las pruebas incriminatorias se llevó a cabo la detención del propietario de esta inmobiliaria al que los agentes de la UDEF le imputan los delitos de estafa y falsedad documental . Una vez finalizado el atestado policial, el detenido fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número uno de Cádiz que decretó su libertad con cargos. Además se ha solicitado que se le bloqueen las cuentas bancarias como medida cautelar.

La investigación continúa abierta, ya que las pesquisas que se han realizado apuntan a que puede haber más personas afectadas. Se aconseja que estas personas acudan a la Comisaría de Cádiz a denunciar si también han sido víctimas de este presunto estafador.