Conciertos Castillo Santa Catalina
Antonio Romera, Chipi: «La cultura también debería priorizarse porque nos hace ser más felices, más humanos y salva muchas vidas»
Fatigas Triples, un proyecto conjunto de Maui, Raúl Rodríguez y Antonio Romera, Chipi, llega por vez primera a Cádiz el próximo 7 de agosto en el Castillo de Santa Catalina
El algecireño Antonio Romera “Chipi” vuelve a Cádiz con Fatigas Triples , un proyecto musical al alimón con Maui y Raúl Rodríguez donde se mezcla música, teatro y poesía con el sedimento de la canción andaluza , aderezando toda la propuesta escénica. Investigador autodidacta del folclore andaluz, fundador y cabecilla de La Canalla reparte su universo creativo como guionista, autor y compositor de canciones para artistas de la talla de Pasión Vega, Silvia Pérez Cruz, Las Migas o Julián Manso, entre otros. Hablamos con este “charlaautor”, como a él mismo le gusta definirse.
¿Cómo surge la idea de Fatigas Triples? ¿Cómo lo definiría? ¿Qué se va a encontrar el espectador?
Fatigas Triples es un espectáculo muy peculiar porque no conozco ningún precedente de este show. Es una especie de cabaret . Somos tres artistas, cada uno de su universo, pero los tres pertenecemos a la canción andaluza y nos gustan mucho los buenos ingredientes que ésta tiene, es decir, el buen hacer de su música y de sus letras y, por otra parte, la guasa y la picardía. Los tres teníamos esa espinita de trabajar juntos. Así que decidimos poner en común nuestras canciones en un único espectáculo donde, de forma honesta, hablamos de lo que es nuestra vida y de la artesanía de nuestras canciones . En esencia, la gente se va a encontrar cómo hemos trasladado al escenario lo del ratito de después de los conciertos que es donde nosotros nos lo pasábamos muy bien juntos.
Sois tres artistas muy diferentes en cuanto a estilo y personalidad, ¿cómo conseguís que fluya la conexión entre vosotros en el escenario?
Aunque pensemos que somos muy diferentes, si después nos comparamos con un grupo indie, un cantautor de Burgos o con un grupo instrumental, al final te das cuenta de que somos hermanos y de que nos hemos criado con las mismas bandas sonoras de Martirio , Ruibal , Triana o Silvio y, por eso, no estamos tan lejos. Y eso nos pasa a nosotros tres, pero también a muchos otros artistas andaluces. Creo que hay un subgénero de canción andaluza que subyace y que, en cierto modo, hay un relevo inevitable porque nos hemos criado con eso. La raíz es muy parecida y esto te ayuda a conectar. Al final el que come puchero, acaba comiendo pringá. Somos distintos frutos, pero de la misma familia .
Estreno en Cádiz y con entradas agotadas, ¿genera más responsabilidad?
El espectáculo es la primera vez que lo hacemos en Cádiz y es verdad que nos da pena porque el aforo se ha limitado para cumplir las normas sanitarias y las entradas se han agotado muy rápido. En cuanto a la responsabilidad, tanto por mí como por Raúl y por Maui, ir a Cádiz es como jugar en casa . Cuando pienso en Cádiz no pienso en gente sino en caras, en nombres, en apellidos… en amigos en definitiva.
Hablando de tus proyectos personales, volvemos a tener a Chipi, La Canalla en Cádiz en septiembre, en concreto en los conciertos del Parador, ¿cuál es tu propuesta en esta ocasión?
Es La Canalla en formato dúo, Tocata Minuta, con una parte musical pero también hay más sitio para los textos, para charlar con el público. Hay más complicidad con el espectador porque hay menos sitio para solos. En realidad, es que yo más que cantautor me podría definir más como «charlautor» ; me gusta más.
Los libros, las películas, la pintura, la música, el arte en general, han sido aliados en este confinamiento, ¿cree que le ha servido a la población para darse cuenta del papel tan importante que juega la cultura en nuestra vida? ¿Ha notado si ha subido el número de personas que se acercan ahora al arte desde otra perspectiva?
Tenemos memoria de pescado para algunas cosas . A pesar de que en algún momento lo hemos podido valorar más, al final se nos olvida muy rápido. Creo que echamos de menos las cosas cuando dejas de tenerlas, no cuando las sigue teniendo. La cultura ha hecho lo que tenía que hacer y ha seguido cumpliendo su misión y ha estado ahí y eso hace que la gente no lo termine de valorar. Se han dado muchos aplausos, muy merecidos todos, pero de todos los que han salido a aplaudir no sé cuántos han necesitado todos los días a un bombero, a un policía, o a un sanitario. Sin embargo, todos han leído un libro, han escuchado canciones o han visto películas y no ha habido ningún aplauso para la gente que ha escrito esos libros, o que sigue contando sus vivencias o que hace un concierto gratuito por Youtub e. Creo sinceramente que la cultura también debería priorizarse porque nos hace ser más felices, más humanos y salva muchas vidas. Es muy difícil que tú veas a alguien haciendo una barbaridad si escucha a Silvio Rodríguez o la novena de Beethoven. La cultura tiende a sensibilizar y la gente con sensibilidad no suele hacer daño a los demás porque tiene más empatía . Aunque es algo muy poco demostrable, la cultura es muy necesaria y ha estado ahí, no ha fallado. Quizás tanta exposición nos ha hecho un flaco favor a la gente del gremio hasta el punto de que se considera prioridad por ejemplo, viajar de un sitio a otro, pero no ir a un concierto. Un autobús puede ir lleno, pero no puede estarlo un teatro.
¿Los conciertos en streaming o al natural?
Un concierto en streaming es devaluar el trabajo de un montón de gente. Si tú coges la guitarra y te pones delante de la pantalla, me parece muy bien, pero seguro que el que está contigo con la guitarra en un concierto, la toca mucho mejor, el técnico de sonido lo hace mejor que tú con el móvil, el show que se monta, la gestión del programador, toda la labor de arreglos musicales, de iluminación… es como si dijéramos que Spielberg en vez de hacer una película, te la va a contar delante de un teléfono. ¿Es lo mismo? No, desde luego que no. U n concierto tiene un valor añadido porque tiene detrás una labor fundamental de unos profesionales del gremio . El producto no es eso. Es como pensar que hacer unas papas con choco es poner el choco encima de la mesa y un kilo de papas al lado. No, son más cosas. Se requiere de una infraestructura. La cultura no es una persona haciendo una cosa, sino muchas personas haciendo muchas cosas .
Si tuvieras que escribir una canción de lo que hemos vivido, ¿qué música y letra tendría?
En la primera semana del confinamiento hice una canción para Pasión Vega que se llama “Imagina que” y ahí está retratado lo que sentía. En la segunda parte, han pasado tantas cosas que creo que la haría instrumental.
¿Qué nos puedes avanzar de los proyectos que tienes en mente?
Trabajo escribiendo para autores , conciertos a dúo y ahora pensando en el siguiente disco . Tengo trece canciones que tengo que poner en pie. Me juntaré con el Galiana, y a ver qué es lo que sale, como pasó con el primer disco de La Canalla.
