Las obras de la nueva estación de autobuses de Cádiz encaran ya su recta final
Las obras de la nueva estación de autobuses de Cádiz encaran ya su recta final - francis jiménez
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La estación de trenes dará los servicios básicos a la de autobuses para que abra

Adif se muestra dispuesta a asumir esta solución provisional, pero advierte de que no tiene capacidad para afrontar la reurbanización de la carretera industrial

Antonio M. de la Vega
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La operación de plaza de Sevilla sigue sin estar clara. Parecía que iba bien encaminada después de un década de dimes y diretes entre las tres administraciones con responsabilidad en la misma, pero la llega del nuevo equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Cádiz ha obligado a dar un nuevo paso atrás. Un paso atrás para mirar el conjunto con otra perspectiva y replantearse el proyecto.

De momento ya se va tarde. La comisión de seguimiento del plan plaza de Sevilla se reunió hace tres semanas y todo quedó pendiente de un nuevo encuentro en el que se deberá acudir con las conclusiones dictadas por las respectivas administraciones implicadas.

Lo que más urge en estos momentos es llevar a cabo las actuaciones de emergencia necesarias para permitir la apertura de la estación de autobuses.

La Junta de Andalucía está a punto de dar por concluidas las obras, pero la carretera industrial no ha sido reurbanizada como estaba previsto y de momento no hay ni accesos a la nueva terminal ni conexiones de agua ni electricidad para poder ponerla en servicio.

Estos trabajos de reurbanización dependen, según el convenio suscrito en su día de Adif, aunque ya se dejaba claro en el acuerdo que la misma quedaba supeditada a la venta de las parcelas que la empresa pública lleva años intentando vender y que no encuentra compradores interesados. Eso impide que se puedan financiar las obras y provoca el mayor problema.

El Ayuntamiento de Cádiz, con el anterior equipo de Gobierno del PP al frente, se ofreció a adelantar las obras (vinculándolas además a las del aparcamiento subterráneo que ahora está en entredicho) para luego reclamar a Adif la inversión una vez que el gran solar del lateral de la estación de trenes sea vendido. Pero los nuevos responsables municipales (Por Cádiz sí se puede y Ganar Cádiz en Común) no parecen estar por la labor de ejecutar las obras, sobre todo teniendo en cuenta que presupuestariamente no tienen capacidad para asumirlas.

El problema, por tanto, es económico. El Ayuntamiento, aunque ha anunciado que va a llevar a cabo una actuación de urgencia para habilitar un tercer carril en la avenida de Astilleros para aliviar los atascos que se suelen producir allí desde la apertura del segundo puente y para facilitar a su vez que se abran unos accesos y salidas provisionales para la terminal de autobuses, volvió a insistir hace unos días, a través del alcalde, que van a hacer un requerimiento formal a Adif para cumpla con su parte del convenio.

De momento, desde Adif apuntan a que el único compromiso que pueden adquirir en este momento pasa por responsabilizarse de una actuación poco vistosa, pero fundamental para que la estación de autobuses pueda entrar en funcionamiento una vez que concluyan las obras, que es suministrarla de los servicios básicos, es decir, agua, electricidad o conexión a internet con los recursos propios de la estación de trenes. Sería una medida provisional, cuyos gastos tendrían que ser resarcidos más adelante por la administración correspondiente, pero al menos permitiría el funcionamiento de la estación de autobuses más allá de que el tráfico pueda acceder a la misma.

A partir de ahí la Administración de Infraestructuras Ferroviarias también está dispuesta asumir otros compromisos menores, como son el traslado, de forma progresiva, del aparcamiento en superficie de que dispone a la entrada de la estación de trenes al margen de la carretera industrial.

Del mismo modo, y solo cuando sea desalojada la actual terminal de autobuses en precario situada también en el acceso de la estación de trenes, se procederá al derribo de la vieja marquesina, de forma que toda esa pastilla de terreno quede libre para que el Ayuntamiento pueda llevar a cabo la construcción de la gran zona verde proyectada para esa zona. Aunque este proyecto también podría tener algunas variaciones, al no haberse pronunciado sobre el mismo el nuevo equipo del Gobierno del Consistorio gaditano.

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