Antonia Mesa sujeta la mano de su hija María Auxiliadora. | EFE
CÁDIZ

Condenan al SAS a pagar un millón de euros a unos padres por daños en el parto de su hija

El bufete de abogados que lleva el caso ha calificado el fallo como «la mayor condena de los tribunales al SAS en lo que va de año»

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Han sido "siete años de sufrimiento" que ahora han dado paso a la tranquilidad de saberse con la verdad. Así se sentían Antonia Mesa y Juan Ramón Crespillo después de que la justicia le haya dado la razón por los daños ocasionados a su hija durante el parto. La Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía ha condenado al Servicio Andaluz de Salud (SAS) y a su aseguradora a indemnizar con un millón de euros a los padres después de que su hija sufriera daños neuronales irreversibles durante el parto.

El Bufete Ortiz Abogados, ha informado hoy en rueda de prensa, de esta sentencia que han calificado como "la mayor condena de los tribunales al SAS en lo que va de año", como puntualizó el abogado José Luis Ortiz.

La sentencia condena al Servicio Andaluz de Salud por "la pérdida de bienestar fetal que sufrió su hija a la hora del nacimiento" lo que le ocasionó "una parálisis cerebral con tetraparesia severa y epilepsia generalizada, como consecuencia de la hipoxia cerebral sufrida durante el parto que no fue, incomprensiblemente, detectada por el ginecólogo del Hospital Puerta del Mar, pese a que los registros cardiotocográficos eran claramente patológicos".

Los hechos se remontan al 28 de Febrero de 2006, cuando Antonia Mesa ingresó en el Servicio de Ginecología del Hospital Puerta del Mar con un diagnóstico de gestación prolongada para su control, valoración y finalización de la gestación.Una vez ingresada, se le realizaron registros cardiotocográficos de la frecuencia cardiaca fetal, para garantizar el buen estado fetal y cuyo resultado estaba dentro de la normalidad.

Sin embargo la progresión del parto "no fue normal" y "no se monitorizó", pese a ser un embarazo de alta duración, "algo que podría haber indicado si hubo sufrimiento fetal", ha explicado José Luis Ortiz. El recién nacido presentó un Apgar bajo, que son indicativos de depresión cardiorrespiratoria y de haber experimentado un sufrimiento fetal durante el parto que fue la causa de sus lesiones posnatal.

José Luis Ortiz ha señalado que "lo verdaderamente sangrante del caso" es que, "el asunto fue tramitado previamente a la demanda, ante el Servicio de Responsabilidad Patrimonial del SAS y sometido al dictamen de la Inspección - Servicio de Aseguramiento y Riesgo, quien había realizado un informe donde imputaba una clara negligencia y mala praxis al Servicio de Ginecología del Hospital Puerta del Mar".

Así, ha denunciado que, tras conocer el informe, éste ha estado "cuatro años metido en un cajón, muy probablemente pensando en que la niña iba a fallecer, y así el costo de la indemnización sería mucho más bajo".

Es por ello que la familia se dirigió directamente al Consejo Consultivo de Andalucía con sede en Granada, denunciando esta grave irregularidad de "que el SAS no quería resolver y tenía 4 años el expediente parado a propósito".

Esta mañana, los padres mostraban su satisfacción por la decisión judicial que permitirá mejorar la calidad de vida de la pequeña. "Reconforta que a nivel judicial se reconozca", ha explicado la madre. De hecho, tal y como han explicado los progenitores, las visicitudes económicas atravesadas durante estos años (en los que uno de ellos ha tenido que dejar de trabajar para atender a la menor) han llevado incluso a suprimir determinados cuidados que permiten mejorar la calidad de vida de María Auxiliadora y frenar su deterioro.

Por todo ello, los padres se mostraban satisfechos aunque son conscientes que "con esta decisión su situación no va a cambiar". "Lo que más me tranquiliza es que tenga una pensión vitalicia para el día que nosotros no estemos", sentenció.