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Lección magistral en el Bernabéu

El Barcelona sentencia la Liga con una goleada histórica (2-6) en el estadio madridista tras pasar como un rodillo por encima del Real Madrid

MADRID Actualizado: Guardar
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Dejen paso al campeón. El Barcelona llegó con el rodillo al Santiago Bernabéu para endosar una goleada histórica (2-6) a un Real Madrid impotente que terminó rindiéndose ante la lección magistral de fútbol de los de Guardiola. Los azulgrana destrozan así la ilusión de la remontada blanca y acentúan las carencias que los de Juande Ramos han venido arrastrando durante toda la temporada, incapaces de ganar a ningún grande con los que se han enfrentado este año.

Las cosas comenzaban bien para los blancos, después de que Higuaín marcara el primer gol al cuarto de hora del partido, pero la reacción culé no se hizo esperar. Cuatro minutos después, Henry, partido grandioso del francés, ponía las tablas en el marcador y el Barcelona cogía la batuta del encuentro. Dirigidos por Xavi e Iniesta, tremendos en el centro del campo, y con toda su artillería en la delantera, donde Leo Messi lideraba el ataque acompañado de Henry y Etoo, comenzaba a engrasarse la maquinaria azulgrana. Tan sólo dos minutos después del empate, Puyol remataba de cabeza una falta sacada por Xavi y le daba la vuelta al encuentro. El Real Madrid se unió al espectáculo como espectador en el tercero, obra de Messi, después de un garrafal fallo de 'Lass', que aprovechó el argentino para que su equipo llegara al descanso con un amplio marcador y con la moral por las nubes tras el golpe de autoridad que estaban dando en el feudo de su eterno rival.

En la segunda parte, ambos equipos comenzaron tal y como acabaron los primeros cuarenta y cinco minutos. El Real Madrid aspiraba al milagro y el Barça esperaba. Ramos, de cabeza, en un saque de falta, establecía el 2-3 y ponía emoción al clásico. Pero la fantasía pudo con la fe y con la épica madridista. Dos minutos después, Henry convertía el sueño de la remontada en pesadilla y, solo ante Casillas, dejaba las cosas en su sítio tras hacer el cuarto. Homenaje al fútbol de los de Guardiola. De ahí al final, el Madrid no pudo más que limitarse a ver la exhibición y repaso que estaba recibiendo del líder. Los blancos no supieron ni encontraron la manera de doblegar a los azulgrana.

El Real Madrid se rendía ante la evidencia: estaban a merced de un Barcelona que, en ocasiones andando, llegaba hasta las inmediaciones del área de Casillas. De ahí al final, media hora de paseo donde Messi lograba su doblete y Piqué culminaba la humillación con el sexto, a falta de diez minutos para el final. El Bernabéu acabó rendido a un estilo de fútbol que está a años luz de lo que por ahí acostumbran a ver. Prueba de ello fue la impresionante ovación que se llevó Andres Iniesta tras ser sustituido por Guardiola. El Barcelona saborea ya su decimonoveno título liguero mientras que el Madrid tiene los ojos puestos ya en las próximas elecciones a la espera de un futuro más claro. La lógica se ha impuesto al deseo.