Nos la jugamos en tres años

Cádiz no está preparada para acoger una gran cumbre de Jefes de Estado de Iberoamérica como la que hay prevista para 2012. Tan simple como eso. A ver qué hacemos. A ver cómo nos presentamos ante el mundo. Porque aquí no hay hoteles ni centros de reunión en condiciones para un evento de semejante magnitud. Quién no recuerda el famoso ¿por qué no te callas? de la última cumbre celebrada en Chile. Tristemente, esa anécdota entre el Rey y Hugo Chávez, con Zapatero de testigo mudo, es lo único que ha trascendido de un evento mundial que reúne a más de 4.000 personas.

Veremos qué se recuerda de la nuestra. Esperemos que se produzca algún tipo de chascarrillo de esta índole que sirva para correr un tupido velo a los problemas de organización que -al tiempo- con casi total probabilidad ocurrirán.

Puede parecer un tema menor. Un asunto de tercera fila con la que está cayendo con la crisis, el paro y la sucesión de parámetros negativos con los que desayunamos cada mañana. Cae la venta de pisos, la de coches, el gasto en ocio, en hostelería, aumenta el desempleo, se disparan los EREs... y en 2009 será peor. Sin embargo, el 2012 puede y debe ser un punto de inflexión para el futuro de Cádiz y San Fernando en particular y de la Bahía en general. De lo bien o lo mal que lo hagamos dentro de tres años depende que nos convirtamos en un lugar consagrado como centro de congresos, con los beneficios económicos que ello conlleva, o que sigamos estando a la cola como estamos hoy en día.

Aún quedan tres años, pero en cuanto a lo más básico, el alojamiento, la previsión es que entre el Playa Victoria, el nuevo Atlántico y el Varcácel -si es que algún día llega a ser un hotel de lujo como llevamos años oyendo- es que lleguemos a las 900 habitaciones. ¿Y las más de 3.000 personas que componen el resto de delegaciones? ¿Qué hacemos con los jefes de estado, diplomáticos, guardaespaldas, periodistas...? Pues más que probablemente dispersarlos por los distintos hoteles de lujo de la bahía. Unos cuantos al Puerto, otros al Novo y a ir rellenando huecos. En eventos como estos, sólo por la seguridad, es clave que no haya tanta dispersión.

Es muy desagradable ser agorero, pero se ve venir. La sensación es que las instituciones implicadas -que ni tan siquiera han sido capaces de ponerse de acuerdo en el logo del Bicentenario o en el nombrecito del segundo puente- es que cada una va a salvar su culo político, a culpar al de enfrente, a acusar a cualquiera que sea de signo distinto. No se dan cuenta de que la celebración del Bicentenario, bien vendido, es suficientemente grande como para que haya medallas para todos. Pero como siempre, se mira más a corto plaza que a largo. Llegará el Doce y la cagaremos. Pero ya verán como nadie tiene la culpa.

Y AHORA ¿QUÉ HACEMOS CON LOS EX DE DELPHI?

El subdirector general de Prestaciones por Desempleo del Ministerio de Trabajo e Inmigración -ahí es nada el carguito- lo ha dicho bien claro. De ponerles a los ex Delphi el contador a cero a los dos años del cierre de la factoría, nada de nada. Chaves pudo prometer y prometió lo que le diera la real gana hace año y medio, cuando vio que los americanos echaban la llave para siempre dejando a 1.549 tíos en la santa calle. «No os voy a dejar tirados», afirmó. Y empezó a poner en marcha becas, cursos subvencionados y demás medidas que, año y medio después, han servido más bien de poco. Una de las promesas más deslumbrantes fue la de que todos aquellos que no estuvieran recolocados a 31 de julio de 2009 (día en que se cumplirán dos años del cierre), se les aplicaría el famoso contador cero y tendrían derecho a dos años más de paro. Por la patilla. En lo que no es más que un clarísimo agravio comparativo con el resto de parados de Cádiz, de Andalucía y de España.

Pero hete aquí que el señor Ruiz, don Eduardo -el del carguito- sale a la palestra y dice que nanay de la China. Que los de Delphi recibirán el mismo tratamiento que cualquier otro hijo de vecino. La Junta y el propio Gobierno ya habían dado su palabra y son prisioneros de ella. Algo inventarán para cumplir con su promesa hecha de cara a la galería. De momento, desvían la atención diciendo que esa afirmación la tiene que hacer el mismísimo ministro. Pero saben perfectamente que metieron la pata. A ver cómo la sacan.

CHAPUZA DE HIELO

El tinglado que han montado en San Antonio ha dejado en evidencia al Ayuntamiento. Una pista de hielo que no hiela. Un anuncio de apertura para el día 13. Un retraso, otro, y otro. Como dice Pepe Landi. «¿Tan difícil es montar una pista de hielo?» Lo del sorteo del Gordo de Navidad no tiene explicación. Cada año los medios de comunicación nos volcamos con un premio que es muy inferior a la mayoría de los que reparte la Onlae y muchísimo más caro. Esta misma semana, sin ir más lejos, un acertante de San Fernando ha ganado 50.000 euros en la Bonoloto y otro de Jerez 180.000 en la Primitiva. Mucho más que los de Ubrique con el Gordo. Pero la atención de las cámaras se la llevan ellos. Puro márketing. / A. ROMERO