Saturación del mercado

l pronóstico de los servicios de estudio del BBVA que augura un ininterrumpido descenso del precio de las viviendas a lo largo de los próximos tres años, está sujeto como todos los vaticinios al contraste con la realidad y, en última instancia, a la evolución de la crisis económica que está en la base de la pérdida de confianza de los compradores. Pero también es cierto que la burbuja inmobiliaria española guarda unas características específicas propias de un mercado recalentado durante años que inevitablemente debe depurarse para recuperar un cierto equilibrio entre la oferta y la demanda. Sin embargo, tampoco es una buena noticia que se derrumbe el precio de las casas porque muchas familias han depositado en ellas el fruto de muchos años de trabajo y esfuerzo. En la medida en que la Administración puede intervenir y condicionar el sector inmobiliario a ella le compete no seguir inundando el mercado con más vivienda protegida; al tiempo que insufla dinamismo el alquiler con o sin opción a compra y coadyuva a que la banca no restringa los créditos hipotecarios.