Prevención contra el contagio

os especialistas insisten en que la mejor forma de prevenir contra la gripe es la vacunación. Pero una vez producido el contagio es importante evitar su propagación. Una de las formas más habituales es la expulsión de saliva al toser, por lo que se recomienda utilizar un pañuelo. También es aconsejable evitar los espacios cerrados llenos de gente, ya que el contagio se produce con facilidad, sobre todo a través de la nariz y la boca. También influye el consumo de alimentos ricos en vitamina C y llevar una dieta equilibrada para recuperar fuerzas tras el debilitamiento muscular que produce la enfermedad. Es importante extremar las precauciones cuando el paciente trabaja en residencias de ancianos y hospitales, aunque generalmente el personal de estos centros está obligado a vacunarse aunque no pertenezcan a la población de riesgo. Respecto al tratamiento para mejorar los síntomas, se centra en paracetamol y Aspirina, para adultos y sólo paracetamol para los niños, tal como aconsejó el doctor Aurelio Arnedillo, neumólogo del Hospital Puerta del Mar. Los fármacos contra la gripe tampoco son demasiado usuales, pues su efectividad depende del tiempo en el que se administren, unas diez o doce horas antes de padecer los síntomas, y sólo adelanta la curación uno o dos días.