por 6.400 millones de euros

El regulador de Nueva York aprueba con condiciones la compra de Energy East por Iberdrola

La eléctrica española, que presentó su oferta hace más de un año, tiene previsto pagar 3.400 millones por los activos y asumirá otros 3.000 millones de deuda

MADRID Actualizado: Guardar
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La Comisión de Servicios Públicos del estado de Nueva York (NYPSC) ha autorizado por unanimidad, aunque con condiciones, la adquisición de la eléctrica estadounidense Energy East por parte de la española Iberdrola.

Con esta autorización, la española ya ha superado todos los trámites necesarios para hacerse con Energy East, en una operación valorada en 6.400 millones de euros, aunque ahora deberá decidir si acepta las condiciones impuestas por el regulador neoyorquino. La eléctrica española, que presentó su oferta hace más de un año, tiene previsto pagar 3.400 millones por los activos de Energy East y asumirá otros 3.000 millones de deuda.

"No es un acuerdo perfecto, puede no ser un gran acuerdo, pero sí es un buen acuerdo", ha asegurado en sus conclusiones finales Maureen Harris, una de las cinco integrantes de la comisión y la que hasta ahora se había mostrado más reticente a dar el visto bueno a la operación.

Tras la reunión, Harris ha asegurado que no se siente "cómoda jugando con el dinero de los demás" y que los entre 275 y 300 millones de dólares que la compañía tendría que revertir en sus clientes en concepto de reparto de beneficios obtenidos con la compra son "dinero real" que no se debe dejar perder. Harris ha señalado además que todas las partes que han participado en la valoración de la operación se han mostrado a favor, aunque algunas hayan considerado necesario incluir condiciones.

La Comisión apela a la reputación de Iberdrola

Harris ha explicado asimismo la "buena reputación de Iberdrola": "Ahora espero que cumpla con esa reputación y que ofrezca la creación de empleo e inversiones que ha anunciado", ha apuntado Harris, quien se ha comprometido a "supervisar personalmente" en los próximos "tres o cuatro años" que le quedan en su cargo que Iberdrola no concentra más "poder vertical" del acordado.

Robert Curry, otro de los miembros del órgano regulador, ha expresado su apoyo a la compra, así como su deseo de que sirva de aliciente a otras compañías europeas para invertir en Nueva York.

El presidente de la comisión, Garry Brown, ha concluido que, aunque la compra implica "incuestionables" riesgos, "creo que contamos con las medidas necesarias para mitigarlos", al tiempo que "supone grandes beneficios" para el estado de Nueva York. Brown también ha apelado a la "reputación de Iberdrola como empresa líder en energías renovables" y ha expresado su esperanza de que su actividad en el estado ayude a Nueva York a conseguir sus objetivos en esa materia.

Ahora sólo falta que Iberdrola estudie las condiciones impuestas por la Comisión de Servicios Públicos de Nueva York y tome una decisión.