OPINIÓN

riegos y tierras

La superficie regada en España, según los últimos datos publicados por el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino (MARM), es de 3.360.782 hectáreas, alrededor del 22% de las tierras de labor. En los últimos cinco años se ha mantenido casi constante, con un ligero incremento que supera el 1%.

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El riego localizado ha aumentado el 36%, lo que contrasta con el 1,4% de incremento de superficie total regada. Ello se ha producido a costa de la disminución de riego a manta y sobre todo por aspersión, con una reducción del 15% y del 20% respectivamente.

A pesar de todo, todavía más del 33% de la superficie es regada por gravedad. En Andalucía se localizan más del 28% de las tierras regadas nacionales, con muy escasa representatividad de este obsoleto sistema, que ocupa menos del 20% del territorio irrigado. El 71% del regadío andaluz es de alta precisión, muy por encima de la media española. Respecto al valor de la tierra, los últimos datos de que dispone el Ministerio confirman que su precio ha subido un 6,4% durante el pasado 2007.

Tendencias

El valor medio alcanzado el pasado año es de 11.070 euros por hectárea. En el caso de Andalucía, el precio medio es el doble que la media y se situó en los 22.445 euros por hectárea, el más alto después del canario y del valenciano. La tendencia en España es opuesta al valor del suelo urbano que siguió en caída libre en el primer trimestre de 2008, según datos del Ministerio de la Vivienda. Ha perdido un 7,7% frente al alza del 6,4% del suelo agrario.

En el caso de Andalucía, la evolución es similar, ya que se ha producido una pérdida de valor del 4,8%, frente al rústico que subió 9,3 puntos. Caso particular es Cádiz, donde el suelo urbano se encareció el 26%.