ATENTO. Un vigilante comprueba en su monitor la situación de sus compañeros en la calle, en la Urbanización de Vistahermosa, de El Puerto. / NURIA REINA
Ciudadanos

Cádiz es la provincia andaluza donde más hogares se protegen contra los ladrones

Durante el verano se incrementa la contratación de sistemas antirrobo en residenciales vacacionales Las empresas de seguridad advierten que los asaltantes a viviendas no esperan ya a que estén vacías

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Cada verano, además de las recomendaciones contra el calor y el cuidado de la piel, se vuelve necesario recordar qué medidas hay que tomar para evitar que los ladrones aprovechen para arramblar con nuestras viviendas mientras estamos de vacaciones. En muchas ciudades españolas, el verano despeja el campo para los delincuentes y se convierte en la época en que más robos se registran de todo el año.

En la provincia de Cádiz, en cambio, las estadísticas se invierten: aquí los robos no son para el verano, sino para el otoño y el invierno, cuando las viviendas de muchas urbanizaciones turísticas se quedan vacías. Al contrario, es en los meses inmediatamente anteriores y posteriores a las vacaciones cuando repuntan los asaltos a chalés y demás viviendas. Con todo, el 80% de los hurtos ocurren en negocios y comercios, «donde los ladrones saben que van a conseguir un botín seguro».

Época para blindarse

A pesar de todo, la época veraniega sí resulta ser la preferida para blindar los hogares, aseguran diversas empresas de seguridad consultadas. De hecho, según una de estas compañías, Securitas Directo, el 37% de las contrataciones de servicios de alarmas que se realizan en la provincia se formalizan durante los meses de junio, julio y agosto. «Lo instalan, sobre todo, personas foráneas de ciudades como Madrid o Barcelona, que están concienciadas con la seguridad y aprovechan antes de volver a sus casas para proteger su segunda vivienda», explica Ernesto Romero, de la central de alarmas Protelec.

A juicio de Romero, los gaditanos tienen «poca cultura de la seguridad» y están poco concienciados. «Muchos prefieren comprar una televisión de plasma a instalar un sistema que puede salir por apenas 450 euros», afirma Romero.

A pesar de esto, según datos de Securitas Direct, Cádiz se destaca como la provincia andaluza donde más alarmas se instalan de la región, ya que aquí se se coloca el 38% del total de nuevos sistemas, según datos de esta empresas, una de las más extendidas.

Es cierto que el 80% de las alarmas antirrobo se colocan en empresas y polígonos industriales, porque sobre ellos se producen ocho de cada diez hurtos. En viviendas, las empresas de seguridad calculan una media de tres a cinco robos al mes (contabilizados sólo en residenciales con servicio de alerta ya instaladas, claro) a los que habría que sumar casi medio millar de falsas alarmas por «intento de robo que quedan en nada».

El hecho cierto es que este tipo de servicios no es habitual en edificios de pisos en los centros urbanos, debido quizá a esa falta de «cultura de la seguridad», a la que aluden las compañías especializadas. «No se trata de psicosis ni miedo, sólo prevención», apuntan. Por una cosa u otra, lo cierto es que el uso de estos sistemas viene condicionado la mayoría de las veces por una mala experiencia con los ladrones.

Las viviendas y chalés apartados, situados en las urbanizaciones turísticas de costa, son generalmente el blanco más fácil y jugoso para los atracadores. Aquellas donde las patrullas de los cuerpos de seguridad acceden con más dificultad o menos frecuencia. También estos son los usuarios principales de estos servicios: Sotogrande, Vistahermosa, la Barrosa, Costa Ballena... En estas exclusivas zonas, el 80% de las casas dispone de equipos propios de detección de presencia. Esto explica que municipios como El Puerto «seab una de las zonas más concienciadas en este sentido a nivel doméstico», explican en Protelec, y que el perfil de los usuarios sea de «gente joven de nivel medio o medio alto».

Urbanización vigilada

Aparte de esto, hay que sumar los cuerpos comunitarios de vigilancia privada. Como explican desde Prosegur, son dos servicios diferentes, pero complementarios. También en verano se incrementa este tipo de servicios, a petición de los propios vecinos.

Por ejemplo, en el residencial de Vistahermosa, en El Puerto, la vigilancia se amplía hasta cubrir las 24 horas, según explica el presidente de la Asociación de Propietarios, Salvador Salvago. «Hemos reforzado también el servicio de vehículos con cuatro motos nuevas y se han sumado nuevos auxiliares en los lugares más conflictivos, como los aparcamientos de la playa», explica el presidente.

Para Salvago, la lógica que explica este refuerzo es aplastante: a mayor número de residentes en verano, mayor recursos en seguridad. Aunque pueda ir en contra de la teoría de que los ladrones prefieren casas vacías para hacer de las suyas.

«No siempre es así», coinciden todos los expertos consultados, que han percibido cómo los asaltantes han modificado su modus operandi, volviéndose más violentos. «Ahora prefieren que los habitantes estén dentro, en lugar de buscar casas vacías». Esto implica que, «en muchos casos, la utilización de la violencia» es cada vez más habitual, añaden desde Securitas Direct.

mgarcia@lavozdigital.es