Cartas

¿Ética y progreso o atraso y crueldad?

Las personas sensibilizadas con el maltrato a los animales estamos recibiendo constantemente noticias sobre continuos casos de torturas y asesinatos de perros en Sanlúcar de Barrameda, sin que las autoridades tomen cartas en el asunto y cumplan con su obligación de encontrar a los responsables de estos delitos.

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Ahora, por si esto fuese poco, nos llegan noticias de que el Ayuntamiento de Sanlúcar está consintiendo con respecto a los animales utilizados en los coches de caballos de la ciudad.

Los datos recibidos dicen que en Sanlúcar las dos paradas de coches de caballos están completamente expuestas al sol, desprovistas de condiciones higiénicas y carentes de abrevaderos y de marquesinas o arbolado para dar sombra a los caballos, que siguen siendo meros esclavos de los humanos. Estos animales, al terminar su 'jornada laboral', quedan exhaustos, repercutiendo gravemente en su estado de salud y sin que esto impida que día tras día sean maltratados nuevamente por sus explotadores.

Quiero que entiendan que mi carta no es para suplicarles que cumplan con su obligación, sino para pedirles que de acuerdo con el cargo que voluntaria y libremente ustedes han aceptado como miembros del Ayuntamiento de Sanlúcar de Barrameda, solucionen rápidamente este problema para proteger el bienestar de estos animales. Esta situación dura más de cinco años, durante los cuales, a pesar de que se les ha pedido medidas contundentes para solucionar estos problemas, continúan infringiendo gravemente la Ley de Protección de los Animales de Andalucía.

Ustedes pretenden que Sanlúcar sea conocida como un lugar privilegiado de cara al turismo, pues permítanme recordarles que haré lo posible para que estos hechos no queden impunes y para que los turistas extranjeros, que no viven en las cavernas, sepan y conozcan con detalle lo que pueden encontrar en su ciudad. No van a disfrutar de unos días de paz en un lugar tranquilo, su destino puede convertirse en una verdadera pesadilla al encontrarse con una sociedad atrasada en el tiempo y anclada en el medievo, donde la civilización y el desarrollo, unido a un trato digno hacia los animales, brillan por su ausencia.

Marisol Lobo Vega. Málaga