TRIBUNALES. La madre, Inmaculada González Braza. / T. B.
Ciudadanos

La madre de dos niños dados en preadopción denuncia que la Junta no le deja verlos

El Gobierno regional considera que los pequeños estaban en estado de desamparo Ha pedido ayuda al Defensor del Pueblo

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A la joven puertorrealeña Inmaculada González Braza le fueron retirados sus dos hijos en 2001 al considerar la Junta de Andalucía que los pequeños se encontraban en estado de desamparo, circunstancia que la familia y amistades de Inmaculada han negado rotundamente.

Los menores fueron entregados a otra familia, que según un informe de los servicios sociales del Ayuntamiento, «reunía las condiciones óptimas afectivas, social, económicas y los niños tienen fuertes vínculos con ellos, por lo que es desaconsejable reintegrar a los niños con su madre».

Ahora, casi ocho años después de la separación, y después de haber denunciado el caso ante la justicia, Inmaculada se queja de que el Juzgado haya decidido no concederle «ni siquiera poder verlos». La madre ha recurrido el fallo ante la Audiencia Provincial.

La sentencia desestima la petición del régimen de visitas argumentando que «entorpecería el proceso, que está avocado a la completa integración de los menores con la familia que conviven mediante su adopción».

La juez señala, además, que según los informes recibidos «la madre biológica carece de un proyecto vital autónomo de desarrollo personal y familiar, siendo incapaz de funcionar de manera adecuada», aseveración con la que ni la madre, ni su hermana Vanesa, ni la abuela materna de los niños están de acuerdo.

Inmaculada reconoce que cuando le retiraron a sus hijos se encontraba mal y bajo tratamiento médico por una enfermedad producida por la conducta de su marido que la «maltrataba física y psicológicamente». Según explica, su ex marido, pues ahora está divorciada, «se portaba tan mal que una vez dejó al mayor» de los hijos, «sobre la basura», como informó entonces la prensa. «Hace tres años -asegura- que me he recuperado de aquello y ya no tomo ningún fármaco».

Inmaculada ha escrito una carta al Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, para que le ayude a recuperar a sus hijos, quien le ha solicitado una copia de la sentencia del juzgado para estudiar el caso.