EN PLENO. Miembros del Tribunal Supremo, durante la presentación de su memoria anual, ayer, en Madrid. / EFE
ESPAÑA

El PP se centra en inmigración para no hablar de aborto y eutanasia

Los 'populares' exigen que De la Vega explique las medidas para evitar la llegada ilegal de extranjeros

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El PP ha sumado la inmigración a la economía como asunto de atención preferente de su política de oposición porque no se quiere distraer con los debates sobre aborto, eutanasia o laicidad que lanzó el PSOE en su congreso.

El Grupo Popular ha puesto en marcha su maquinaria parlamentaria para centrarse en los cambios de la política del Gobierno en inmigración aunque ya concluyó el periodo ordinario de sesiones. Los 'populares' solicitaron ayer la comparecencia urgente de María Teresa Fernández de la Vega para que explique los acuerdos sobre inmigración alcanzados por el Gobierno con la Unión Europea en la reciente cumbre de Cannes y rinda cuentas de su trabajo al frente de la coordinación gubernamental para frenar la llegada ilegal de inmigrantes. Respondieron así a las iniciativas planteadas por los socialistas para reformar la interrupción voluntaria del embarazo, la desaparición de símbolos religiosos de los ámbitos públicos y la regulación del testamento vital, que fueron defendidas por Fernández de la Vega.

La portavoz 'popular', Soraya Sáenz de Santamaría, dijo sin disimulos en rueda de prensa que no hablará de las polémicas lanzadas por el PSOE mientras no se concreten en iniciativas legislativas, ya que considera que se trata de «una cortina de humo» para evitar abordar las soluciones que requiere la crisis económica. Aseguró que el PP ya se pronunció en la primera comparecencia de la vicepresidenta en el Parlamento en la actual legislatura y pidió «salvaguardar los consensos». Sobre el aborto, aseveró: «Hasta que no vea la propuesta y sus términos no me voy a pronunciar». No obstante, exigió el cumplimiento de la ley vigente y pidió que «no se divida a los españoles».

El próximo otoño, el Parlamento abordará otras iniciativas que presentó ayer el Grupo Popular para demostrar que el Gobierno socialista cambió su política de inmigración y se acercó a las tesis que defendió el PP en la pasada legislatura. Los 'populares' pretenden que la Cámara se pronuncie sobre la prohibición por ley de las regularizaciones masivas de inmigrantes en situación irregular, en línea con uno de los acuerdos adoptados por la UE esta semana, a propuesta de Francia y España.

Aunque Mariano Rajoy expresó el lunes su deseo de pactar una política de Estado para la inmigración, su grupo se apresta a llevar la iniciativa con elementos de su discurso que coinciden con los actuales planteamientos comunitarios. Una de sus proposiciones reclama la aprobación de un nuevo modelo de reagrupación familiar para «evitar las reagrupaciones en cadena» y lograr «la integración laboral inmediata de los familiares», según explicó Soraya Sáenz de Santamaría.