RAZA. Julián Rubio se lamenta por una acción de su equipo. / FRANCIS JIMÉNEZ
JULIÁN RUBIO EX ENTRENADOR DEL CÁDIZ

«Hubiera dejado al equipo muy arriba si lo cojo tras la marcha de García Remón»

Julián Rubio analizó nada más llegar a su casa de Albacete todo lo ocurrido en los intensos tres partidos en los que ha estado al frente de la nave amarilla

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Julián Rubio es un tipo agradable, cumplidor, que huye de polémicas («habló claro, así que no me gusta que se malinterpreten mis palabras», dice). Muestra su respeto por el trabajo bien hecho en cada oportunidad que se le presenta y bajo una fachada de exigencia perpetua se esconde un optimista sereno: siempre dispuesto a enfrentar y superar los constantes obstáculos de la vida (como demuestra que el tono de llamada de su teléfono móvil sea la mítica canción de Gloria Gaynor I will survive).

-¿Cómo se siente ya en frío tras el descenso?

-Aún no lo he digerido. Jamás contemple la posibilidad de descender. Ni tan siquiera en las peores pesadillas me imaginé un final así. Todavía me retumban las imágenes de los partidos. Sobre todo, del último ante el Hércules.

-¿Qué recuerdo se lleva de Cádiz y del Cádiz?

-El resultado no era el esperado, pero el recuerdo no puede ser malo porque la gente me ha apoyado muchísimo. La directiva, los aficionados, los medios de comunicación me han tratado muy bien. Así que sólo puedo estar agradecido.

-¿Está completamente desvinculado del equipo?

-Soy libre, pero hace tres semanas no había contemplado el quedarme y ahora siento que he contraído una deuda con la ciudad y la afición y si puedo pagarla lo haré. De todos modos, no puedo urgir a nadie. La directiva está trabajando en un nuevo proyecto y seguro que está barajando muchas opciones.

-Si le llaman, ¿volvería aunque sea en Segunda B?

-Es trabajo y no se tiene que decir nunca que no al trabajo. Nunca hago ascos al trabajo. He entrenado en Primera, en Segunda, en Tercera... la categoría no es lo más importante.

-¿Qué fallo en los tres partidos que se sentó en el banquillo del Cádiz?

-Falló que no hubo una victoria. No convertimos muchas ocasiones que tuvimos. Faltó suerte. Una suerte que si tuvieron otros equipos. Ante el Málaga hicimos lo que debimos; que era parar el descenso vertiginoso en el que estábamos. En ese partido se cumplió el objetivo y había buenas sensaciones. Ante el Sevilla Atlético nos merecimos la victoria a pesar del nerviosismo que sentíamos todos. Y en Alicante también nos merecimos ganar. Tuvimos muchas oportunidades de marcar, un gol mal anulado y el penalti.

-¿Se hubiera salvado el equipo si lo hubiera cogido antes?

-Si estaba seguro de salvarnos en tres partidos, imagina con más jornadas por delante. Estoy satisfecho con el trabajo que se ha hecho en tres semanas. Logramos estabilizar al equipo. Cuando hablaron conmigo la primera vez fue tras la destitución de García Remón. Si cojo al equipo entonces lo hubiera dejado muy arriba, luchando por ascender.

-¿Qué hubiera cambiado?

-Hubiera tenido tiempo de inculcar, trabajar con cierta tranquilidad, fichar jugadores, castigar e imponer un estilo. Se da mejor el trabajo a largo plazo, aunque tenga cierta fama de salvador porque salve al Poli Ejido cuando sólo tenía diez puntos en diciembre. Pero en tres partidos era como correr los 50 metros lisos: cualquier mínimo fallo te hace perder la carrera. De todas formas, no hay que poner excusas. Aunque sigo sin admitir el descenso.

-¿Entonces cree de verdad que había plantilla para luchar por el ascenso?

-La plantilla era muy buena, aunque estuviera mal planificada desde el principio. Aún así, siempre tenía 14 o 15 jugadores con muy buena predisposición y forma, y eso es muy importante aunque haya 5 o 6 jugadores que no estén dando el rendimiento esperado.

-¿Sigue dolido por la actitud de los jugadores tras el partido de Hércules?

-Yo estoy contento con la plantilla. Nunca vi falta ni ganas de trabajar ni tengo peros a cómo se jugaron los partidos. Además, no quiero hurgar en esa herida, pero no me gusto ese comportamiento. Esas faltas de indisciplina no se habrían dado si hubiera llevado más tiempo de entrenador. Me hubieran conocido y ni lo habrían intentado. Estoy seguro que más de uno está arrepentido por la decisión que tomaron en caliente.

-¿Qué tiene que cambiar el equipo para regresar a Segunda cuanto antes?

-Si la directiva me pide su opinión, la daré. Pero prefiero no meterme en eso de forma pública. No quiero dejar mal a nadie.

-¿Qué es lo mejor y lo peor de su paso por el Cádiz?

-Lo mejor ha sido el apoyo recibido de todo el mundo. Lo peor, sin ninguna duda, la repetición constante del fallo del penalti en mi cabeza.