LEGIÓN

La Legión rinde homenaje a la Bandera en Málaga

La ciudad salió a la calle para admirar a los soldados, que discurrieron entre la muchedumbre con su paso habitual y cantado «El novio de la muerte»

Desfile de la Legión por Málaga F. SILVA

J.J. MADUEÑO

Donde la tradición marca que los heridos de guerra del Tercio iban a recuperarse de sus heridas o, simplemente, a abrazar a la muerte. En Málaga. Ciudad que venera a la Legión como esa hija que llegó en 1921 a vincularse con el Cristo de la Buena Muerte por orden de José Millán-Astray, fundador del Cuerpo. Desde entonces, el idilio se acrecienta. Hasta los pequeños tararean un himno de honor sacado de la historia de un antiguo caballero legionario. Si los soldados del Tercio anuncian su visita, Málaga se echa a la calle a darles su apoyo. Vítores y aplausos no faltan a su paso. Y así ha sido también este domingo, cuando el Tercio ha celebrado el Día de la Fuerzas Armadas (26 de mayo) en Málaga rindiendo honores a la Bandera en la Plaza de la Constitución.

Retumbaron los tambores por el centro la ciudad. Las botas marcaron el eco a 160 pasos por minutos. La legión llegó ante el mástil de la Plaza de la Constitución pasadas las 12.00 horas. Una escuadra de gastadores acompañada por los guiones y banderines del Tercio. El paso lo marcó la banda de guerra del IV Tercio Alejandro Farnesio. Fueron los encargados de llevar la Bandera Nacional hasta el corazón de la capital de la Costa del Sol. Donde fue izada en un acto solemne.

El evento estuvo presidido por el coronel del IV Tercio, Ramón Armada, y el alcalde de la ciudad, Francisco de la Torre, que remarcaron en sus palabras la unión que tiene el pueblo de Málaga con este cuerpo. Conexión que alcanza su máxima expresión el Jueves Santo , cuando tras días de guardias de honor a su Sagrado Protector, el Tercio desembarca en Málaga para entronizar a su Cristo de la Buena Muerte y entregarlo en un baño de Gloria al pueblo. A Él aguardan aquellos que son presente, pasado y futuro legionario entre lágrimas, recordando aquella vieja promesa, aquel milagro cuando estaban perdidos.

Miradas de amor de los más aguerridos guerreros que se plasman en las calles y la identidad de la ciudad, que le expone como ejemplo ante los niños enfermos, sabedores que para los pequeños en Málaga un legionario no es sólo un militar, sino un referente, el guardián de un código legendario de honor que se plasma en el «Credo Legionario», sacado del Bushido japonés, y «El novio de la muerte», himno que todos conocen y tararean.

«¡Viva España!» se gritaba en las calles este domingo, mientras la Bandera de la Nación era izada. Se cantó a coro «El Novio de la Muerte» cuando los guiones y banderines se acercaron a la enseña símbolo de la unidad de todos. El capellán castrense dirigió el rezo por los caídos y hubo toque de oración, que acabó con laureles a los pies de la Bandera .

Tras esto, los legionarios abandonaron la plaza para acabar el desfile en la Plaza del Obispo. Lugar donde todavía esta guardada la esencia del día histórico que fue el sábado con una Magna en honor de la Patrona, la Virgen de la Victoria, que sacó a la calle a todas las Vírgenes coronadas de Málaga en una apoteosis de devoción a la Virgen María.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación