Investigan como un ajuste de cuentas el último crimen de Mijas

Los agentes encargados de investigar el asesinato ocurrido la madrugada de este viernes en el municipio malagueño de Mijas, en el que perdió la vida un hombre de origen colombiano y su novia resultó herida grave, trabajan con la hipótesis de que se trata de un ajuste de cuentas, de ahí que se indague en las actividades y relaciones de la víctima mortal.

Fuentes cercanas al caso consultadas por ABC explicaron que las pesquisas señalan como autores a tres individuos que se bajaron de un vehículo de alta gama de color oscuro y que no dudaron en dejar en el lugar las tres pistolas que emplearon para ejecutar a su víctima y herir a la chica, de 26 años y también de origen colombiano.

Los hechos sucedieron sobre las 4:30 del viernes en la calle Romeral de la urbanización Calypso del municipio mijeño, cuando las fuerzas de seguridad fueron alertadas de que se habían escuchado varias detonaciones.

Hasta el lugar se desplazaron efectivos del Instituto Armado y de la Policía Local, que encontraron a un hombre tendido en el suelo y que había recibido al menos cinco disparos por detrás. La víctima fue alcanzada en la espalda y, una vez en el suelo, supuestamente fue rematada en la cabeza.

Los agentes estaban acordonando la zona y realizando la pertinente inspección ocular cuando, tan solo cinco minutos después, se recibió un segundo aviso en el que se alertaba de que en un bar del centro comercial El Zoco había una joven herida.

Ésta resultó ser la compañera sentimental del fallecido, que logró escapar del tiroteo, a pesar de que fue alcanzada en tres ocasiones: en un brazo y en el costado. La mujer, gravemente lesionada y perdiendo bastante sangre, caminó hasta llegar al local y pedir auxilio.

La joven fue trasladada de urgencia al hospital Costa del sol de Marbella, donde ingresó con pronóstico grave para posteriormente ser intervenida. Antes de ser llevada en ambulancia, aportó algún dato vago del vehículo de los tiradores.

Agentes del Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Mijas y del grupo de Homicidios de la Comandancia de Málaga se han hecho cargo de las pesquisas.

Se da la circunstancia de que el pasado mes de julio la Guardia Civil informaba de la conclusión de un caso en el que la víctima también fue Alexánder J.B., un individuo también de origen colombiano que en septiembre de 2015 fue brutalmente asesinado en el municipio mijeño.

La «operación Campanales» se saldó con la detención de otras dos personas después de que los agentes arrestasen al autor material del crimen, un joven y su cómplice que montados en una motocicleta se acercaron al vehículo conducido por la víctima y le dispararon a quemarropa hasta en siete ocasiones.

Los investigadores barajaron desde un primer momento la hipótesis del ajuste de cuentas por asuntos relacionados con el narcotráfico, hechos que finalmente se corroboraron en el curso de la investigación.

Los agentes realizaron cinco registros en Mijas, Fuengirola y Benalmádena, incautándose en los mismos de dos kilogramos de cocaína, cinco armas de fuego (dos escopetas, dos pistolas y un revolver), así como abundante munición, chalecos antibalas y gran cantidad de teléfonos móviles. Además se intervinieron un turismo y dos motocicletas, una de ellas la utilizada para cometer el asesinato.

Los arrestados fueron acusados de los delitos de asesinato, contra la salud pública, tenencia ilícita de armas, robo de vehículos a motor y falsificación documental.

Con esta operación se esclarecía la tercera muerte violenta ocurrida en Mijas durante el pasado verano, las dos anteriores fueron resueltas en el marco de las operaciones «Adelfas» y «Rencilla».

A la de Gary Hutch, a finales de septiembre del año pasado y enmarcada en la guerra que los clanes irlandeses están exportando a España, se une ahora la muerte de este hombre de origen colombiano. La información que pueda proporcionar su novia será clave.