La probable cesión del servicio de recaudación genera la primera polémica política del mandato en Jaén

El anuncio del alcalde de Jaén, Julio Millán , de que el Ayuntamiento de Jaén está dispuesto a ceder a la Diputación el servicio de recaudación, uno de los motores de la gestión municipal, ha generado la primera polémica del mandato: el PP ha calificado la decisión como un desprecio a los empleados municipales adscritos al área. Y, dado que la concejalía de hacienda la rige Ciudadanos pregunta a su portavoz, María Cantos , si está de acuerdo con el despojo.

En concreto, Manuel Bonilla , concejal del PP y exedil de hacienda en el pasado mandato, ha pedido a María Cantos que explique si el pacto alcanzado con el PSOE «incluye el desmantelamiento de los servicios municipales, como el de gestión y recaudación tributaria», que, según ha expuesto, cuenta con « magníficos profesionales », quienes “están comprometidos con el buen funcionamiento y desarrollo de la actividad encomendada.

Bonilla ha advertido que los concejales de su grupo no apoyarán el desmantelamiento de las diferentes estructuras del Ayuntamiento, sino que, antes bien, «lucharemos y pelearemos para que se realice una dotación de los medios necesarios para que los empleados municipales puedan desarrollar sus funciones con garantía».

Para Bonilla, es necesario continuar con el « refuerzo de la autonomía municipal en la gestión recaudatoria y de las multas de tráfico», dado que el consistorio cuenta con una plantilla municipal «excelente» a la que hay «que cuidar». “Tenemos el personal cualificado que puede desarrollar perfectamente la función de recaudación de todos los tributos locales y de las multas, que en todo caso debe ser reforzado y dotado de mayores medios”, ha expuesto el edil popular.

Además, ha recordado, que sólo en 2018, la recaudación tributaria incrementó los ingresos municipales en 5 millones de euros y que los porcentajes de recaudación son similares a los del organismo de recaudación provincial. Tanto es así que, por ejemplo, la cuantía obtenida por el cobro de las multas ha superado los 1,25 millones de euros en el último año. Y esto sin tener que abonar ningún coste de cobranza a la Diputación.