Crece el deterioro del inactivo tranvía de Jaén

La infraestructura del tranvía de Jaén se deteriora después de permanecer más de 7 años paralizado . Tras el acuerdo alcanzado el pasado mes de junio entre el Ayuntamiento, la Junta de Andalucía y la Diputación provincial para que la administración autonómica explote este sistema de transporte, que ha costado casi 130 millones de euros, no se ha llevado a cabo un mantenimiento correcto del mismo que preludie su próxima puesta en funcionamiento.

La falta de adoquines en una parte de la vía evidencia el déficit de mantenimiento de esta infraestructura, cuyo itinerario está jalonado también de suciedad. Tanta, que se amontonan escombros en la propia entrada de las cocheras del tranvía, en tanto que a lo largo de su superficie es constante la presencia de basura. Además, en determinadas marquesinas, cuyos expendedores de billetes sirven de papeleras, se fijan carteles y se realizan pintadas .

Para arreglar la infraestructura deteriorada las administraciones deberán de librar una cantidad adicional a la que requiere poner en funcionamiento un sistema de estas características, cifrada en 1,5 millones de euros cada año . Del total, la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía sufragará el 75% y el Ayuntamiento el 25% restantes. A cambio, el consistorio cede la gestión de este recurso a la administración autonómica.

El objetivo de las 3 administraciones públicas relacionadas con el tranvía es que entre en funcionamiento en marzo de 2019 , es decir en los meses previos a la celebración de las elecciones municipales. Con todo, la repercusión que este hecho tenga en las urnas no está clara, dado el hartazgo de los jiennenses respecto a la infraestructura, que estrangula el tráfico del paseo de la Estación, la principal avenida de la ciudad, al reducir los carriles para automóviles.

Por esta razón, la crítica ciudadana al tranvía, ideado para descongestionar la circulación, es constante, si bien decenas de conductores lo utilizan cada día para estacionar provisionalmente, lo que le convierte en un enorme aparcamiento improvisado . No son los únicos que le dan uso: corredores populares también entrenan en otra parte del trazado.

No siempre ha sido así. En 2011, la entonces alcaldesa de Jaén, Carmen Peñalver , ordenó que el tranvía funcionara en período de pruebas. Miles de personas utilizaron gratuitamente este servicio. Peñalver pretendía, previsiblemente, rentabilizar electoralmente el proyecto, pero en los comicios fue vapuleada por el candidato del PP, José Enrique Fernández de Moya , quien como alcalde se mostró contrario a mantener este transporte porque, adujo, su elevado coste de explotación elevaría aún más la deuda municipal.