El Partido Popular de Almonte denuncia trato de favor a funcionarios y empresas vinculadas al PSOE

Gratificaciones para funcionarios afiliados o simpatizantes del PSOE y pago rápido de las facturas que emiten ciertas empresas vinculadas familiarmente con concejales socialistas en el Ayuntamiento de Almonte. Es la denuncia que han realizado los populares almonteños, que han cifrado las propinas otorgadas a «ciertos» trabajadores municipales –«siempre los mismos» y siempre con el vínculo de su afinidad política-, en 269.762 euros, cantidad que se ve incrementada con el pago de la productividad del «personal de seguridad» en 368.941,33 euros más.

Para el PP del municipio onubense, el hecho resulta aún más sangrante teniendo en cuente que «estamos hablando de un Ayuntamiento que ha tenido que aprobar dos fondos de rescate de más de 21 millones de euros en esta legislatura », el último en diciembre, como advirtió el portavoz de la formación, Manuel Ángel Fernández . “Viendo las cuentas ruinosas del Ayuntamiento, además nos encontramos con el dispendio de las gratificaciones a los funcionarios”, con cantidades que «nos resultan totalmente escandalosas», insistió.

El portavoz popular aclaró durante la rueda de prensa convocada para hacer pública la denunciar que además de una moción presentada en el último pleno ordinario para evidenciar esta cuestión, se ha solicitado una reunión de los grupos de la oposición con el equipo de Gobierno socialista para hacer una planificación «basada en criterios objetivos» a la hora de otorgar las gratificaciones al personal municipal, gratificaciones que siempre deben recompensar «trabajos extraordinarios realizados fuera de la jornada laboral y siguiendo criterios objetivos».

Pero el presunto nepotismo en el que estaría incurriendo el equipo de Gobierno socialista de Rocío Espinosa no se limitaría a los trabajadores. Según el PP de Almonte, también alcanzaría a los proveedores, que actualmente soportan una espera de más de 190 días para poder cobrar sus facturas a excepción de algunas empresas, que vendrían cobrando en aproximadamente 40 días. El por qué, según el PP, está en la relación familiar entre esos proveedores y ciertos concejales del Gobierno de Almonte, algo «totalmente rechazable e inmoral» que «está comprometiendo la imparcialidad que debe ostentar este Ayuntamiento».

Acerca de la espera que están sufriendo los proveedores –a excepción, según los populares, de unos pocos privilegiados -, el Partido Popular ha clamado contra el «terrible abuso y la carga que están soportando» a causa de esta demora, que contrastaría con la que los populares dejaron al acabar su legislatura en 2015, cuando un proveedor tardaba en cobrar 56 días de media.