Doble crimen de Almonte: Cuatro años de «padecimientos y de amargura»

El absuelto por este crimen y su familia esperan volver a la normalidad de sus vidas tras el proceso judicial

El absuelto por el crimen ante el Supremo ABC

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La familia de Francisco Javier Medina , absuelto por el doble crimen de Almonte (Huelva), en el que perdieron la vida una niña de 8 años y su padre en abril de 2013, espera que con la sentencia del Tribunal Supremo confirmando su absolución «se les restituya la normalidad en sus vidas».

Así se recoge en comunicado remitido a los medios en nombre Medina por el Bufete Baena Bocanegra que se ha encargado de su defensa en ese procedimiento, en el que se precisa que dicha sentencia «cierra definitivamente cuatro años de padecimientos y de amargura».

Durante todo este tiempo de «incomprensión y de ataques constantes», Francisco Javier Medina y su familia han mantenido «siempre una confianza absoluta en la Justicia con la certeza de que, algún día, llegaría este final en el que se aclararían las infundadas acusaciones que lo llevaron a la cárcel y que, de forma irremediable, han provocado el más intenso sufrimiento y dolor».

La sentencia, firme y definitiva, del Tribunal Supremo , prosigue el comunicado, «pone cordura y sensatez en un proceso penal en el que se ha pretendido construir una acusación contra todas las evidencias y pruebas que, desde el primer día, mostraban lo imposibilidad de que esta persona tuviera alguna relación con los trágicos hechos ocurridos en Almonte el 27 de abril de 2013».

Catorce meses después, el 28 de junio de 2014 la Guardia Civil detuvo a Medina , quien desde entonces proclamó su inocencia y que ahora, y tras el veredicto de no culpabilidad pronunciado el 6 de octubre de 2017 por mayoría absoluta del Tribunal del Jurado , tres sentencias judiciales consecutivas -de la Audiencia Provincial de Huelva, Tribunal Superior de Justicia de Andalucía y del Tribunal Supremo- han confirmado y reiterado.

«La solidez y contundencia de estos fallos debe servir para que cesen, de forma inmediata, las campañas de acoso y desprestigio que Medina y su familia han soportado durante todos estos años, sospechosa y especialmente cada vez que se acercaba el momento en el que un Tribunal de Justicia tenía que pronunciarse sobre el caso, sin duda con la intención espuria de influir en sus resoluciones », según la fuente.

Ha añadido que a lo largo de este tiempo ha dado «sobrados ejemplos de templanza tras cada ataque , con el silencio y el respeto absoluto al sistema judicial español» y que por ello los familiares confían en que se les restituya la normalidad de sus vidas de ciudadanos de Almonte «que les fue robada en 2014».

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