El cementerio de Monturque, escenario de múltiples actividades culturales

Son fechas para recordar la memoria de los que se fueron. Pero en el cementerio de San Rafael de Monturque se han abierto las puertas por otra razón bien distinta. Lugar muy frecuentado por los aficionados al turismo funerario gracias a su singularidad, ahora mismo se están celebrando las jornadas Culturales y Gastronómicas Mundamortis , ligadas al mundo funerario.

El cementerio se presta a ello. Nada más traspasar la puerta principal del recinto el visitante se sumerge en un espacio de tranquilidad que invita a la reflexión, mientras se recorren las escasas calles que componen el escueto recinto en cuyo centro se encuentra uno de los grandes atractivos del lugar: las inmensas cisternas de época romana . Precisamente ayer, estaba previsto que se ofreciera la representación de un funeral a un patricio romano, pero el fallecimiento de una trabajadora municipal hizo que se suspendieran todos los actos que estaban previstos para el viernes.

Lo curioso de este recinto de enterramiento cristiano es que carece de panteones o de grandes construcciones funerarias . Los enterramientos se distribuyen en forma de nicho en torno a los muros perimetrales y sólo quedan visibles unas cuantas tumbas en el suelo, distribuidas en perfecto orden . Durante estas jornadas, que finalizan mañana, domingo, se han organizado visitas al camposanto y a las Cisternas en un triple pase de mañana, mientras que esta misma tarde se llevará a cabo una visita teatralizada a San Rafael, las cisternas, el Mirador de los Paseíllos y Parroquia de San Mateo a cargo de la empresa cordobesa Eventos con Historia .

Y si algo llama la atención son la gran cantidad de enterramientos antiguos que hay. Algunos son de 1894 o principios del siglo XX aunque algo desperdigados, para pasar a épocas posteriores. Con esta perspectiva casa bastante bien la actividad prevista para mañana con un ruta sobre el Monturque Misterioso a cargo de la empresa Córdoba Misteriosa y Rutas Misteriosas , colaboradora en Cuarto Milenio. Como no podía ser e otra forma, será en el Mirador de los Paseíllos, junto al Criptopórtico , donde el ambiente es perfecto para contar historias.