CULTURA

La candidatura de Medina Azahara a la Unesco precisa de más documentación

Icomos se lo comunica al Ministerio de Cultura tras las primeras visitas de los examinadores a Córdoba

Turistas en el acceso oriental a la zona del Alcázar de Medina Azahara VALERIO MERINO

R. RUIZ

El Consejo Internacional de Monumentos y Sitios -conocido internacionalmente por sus siglas en inglés, Icomos - ha pedido al Gobierno de España que presente ante la Unesco una ampliación de los documentos que componen la candidatura de Madinat al-Zahra, nombre oficial del yacimiento arqueológico de Medina Azahara de Córdoba en el expediente que se tramita ante la Unesco de cara a conseguir su inscripción en la lista de Patrimonio de la Humanidad.

No hay que alarmarse, en principio. Fuentes de la Unesco han explicado a ABC que suele ser habitual en estos procesos, prolijos por definición, que se realicen demandas concretas de información que a veces son de contenido y otras cartográficas.

Los asesores de Icomos tienen que elevar ante el Comité de Patrimonio Mundial su informe sobre la situación del yacimiento y sobre el plan de gestión presentado por el Ministerio de Cultura a instancias de la Junta de Andalucía , que es quien dirige el día a día de la zona arqueológica de interés.

Hasta el momento, se han producido dos reuniones de trabajo entre los responsables de Icomos en París y sus interlocutores del Ministerio de Cultura, que no ofrecen información sobre el contenido de los encuentros.

Decisión, en 2018

El primero, en septiembre, se produjo tras la primera visita de un experto italiano en Arquitectura y en aspectos relacionados con los paisajes y los jardines históricos, Atillio Petruccioli . El primer examen suele consistir en una constatación sobre el terreno de los datos aportados en la candidatura en elementos como el territorio protegido, la zona de amortiguación (obligatoria en todos los expedientes y Unesco y que el Casco Histórico de Córdoba aún no ha tramitado) o los elementos de gestión cultural.

El más reciente, en el mes de noviembre, sirvió para que Icomos trasladase que necesitaba documentos añadidos a los ya presentados en la candidatura, que será la única española en la reunión de Baréin, durante el verano de 2018 . Hasta ahí llegan los datos que se ofrecen sobre la materia ya que se asegura que hasta que las cuestiones no están escritas, no se informa de ello para no influir en los expertos que han de trabajar en la materia.

España estará por primera vez entre los 24 países que forman parte del Comité del Patrimonio Mundial que es el órgano que elige formalmente las candidaturas. La evaluación, afirmaron desde Unesco, se dará a conocer unas cuatro semanas antes de la reunión.

Se pueden producir tres propuestas: aprobar la candidatura, rechazarla o pedir que se retire para su ampliación o reelaboración. En el comité no se vota ya que las decisiones se adoptan por consenso. Se trata de determinaciones donde pesa tanto la calidad del trabajo presentado como el trabajo que realicen los Estados para dar soporte a la campaña.

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