La afición se posiciona en el estreno

El Córdoba eligió un acto austero para presentar un proyecto que podría considerarse ambicioso. Al menos, en cuanto a objetivo. Porque el equipo presidido por Carlos González se ha fijado el ascenso como única meta. En la presentación, sin embargo, no destacaron los nombres de grandes fichajes. Tampoco un espectáculo visual como el de ediciones anteriores. Incluso el público respondió con timidez a la llamada del club.

Pero la escasa afición que acudió a El Arcángel para ver desfilar a sus hombres, a eso de las 20.20, dejó claras sus preferencias. El primer gran aplauso de la tarde fue para López Silva, uno de los jugadores más queridos por la grada, que afronta su quinta temporada como blanquiverde.

Algo similar ocurrió con el recuperado Carlos Caballero.

Quedaba por ver cómo recibía la grada a los nuevos. De muchos aún no conoce mucho, pero a todos les brindó su cariño. Entre unos y otros, se colaban nombres especialmente significativos, como el ovacionado Florin Andone o el de la gran estrella del proyecto, Xisco Jiménez, a quien El Arcángel sabe que deberá encomendarse durante una nueva temporada para celebrar buena parte de los goles del equipo. Además, Fran Cruz, que se ha ganado durante la pretemporada su permanencia en el bloque de José Luis Oltra, disfrutó de una nueva muestra de afecto de su ciudad.

El acto, carente de cualquier estridencia, sí que tuvo una anécdota importante. Fue un toque de atención, quizá un último aviso para la directiva y un jugador, Patrick Ekeng, llamados a entenderse. Ni el club quiere al camerunés ni el centrocampista quiere seguir. Y en el estreno quedó claro que la grada ribereña espera que su salida se produzca cuanto antes. El africano recibió los únicos pitos de la presentación.