Cuando el arte de ligar se practica desde el «smartphone»

La seducción se lleva practicando desde tiempos inmemoriales. El arte del ligoteo, eso sí, ha cambiado radicalmente de forma en los últimos años. Y el móvil, ahora, aunque solo se justifique por ser, probablemente, el aparato electrónico más revolucionario de la historia y estar en millones de bolsillos, se ha convertido en un arma imprescindible para encontrar pareja. Aplicaciones de citas, servicios para buscar pareja y redes sociales de todo tipo son los actuales cartuchos para iniciar la guerra del amor.

Comparado con el resto de ediciones, la versión española de Meetic tiene la tasa más alta de Europa desde dispositivos móviles (70% frente a una media del 56%), lo que da buena muestra del empuje del entorno móvil en los tiempos que corren.

«Es gracioso porque pensamos que los españoles pensamos a menudo que somos los últimos en todo pero en tecnología, adaptación de nuevos medios y formas, acceso a dispositivos vamos a la cabeza de Europa, somos bastante atrevidos y con mucha valentía», explica a este diario María Capilla, directora de Marketing y Comunicación de Meetic, que lleva trabajando en la popular red de contactos desde hace un lustro.

La compañía evaluó sus estadísticas hace un par de años. Luego de un estudio elaborado internamente, observaron que hasta 2013 «conocer a gente por internet podía ser una barrera» pero en 2015, tras repetir el análisis, se ha confirmado la tendencia al alza: «España está a la cabeza de conocer a gente por internet». Al igual que otras plataformas del sector, en los últimos años se ha producido una extensa migración hacia el entorno móvil, donde ahora se juegan las cartas del amor.

El negocio del amor: 250 millones de euros

Ese arte de ligar ha cambiado profundamente en los últimos años con el impulso y la popularización de las redes sociales y, ahora, lo está haciendo gracias a las aplicaciones. El móvil como puerta de entrada al conocimiento de personas se mueve en torno a dos vertientes. Por un lado, los usuarios (principalmente adolescentes y adultos jóvenes) que encuentran en herramientas como WhatsApp, Tinder o Snapchat una oportunidad para desplegar sus redes amorosas y aquellos que desean caminar sobre seguro en busca de su pareja ideal, por lo que acuden a servicios de suscripción como Meetic o eDarling.

Y el negocio del amor va viento en popa. Para hacernos una idea, Match Group, el grupo propietario de la aplicación móvil de citas Tinder, ganó 6.17 millones de euros al término de su primer ejercicio fiscal correspondiente a 2016, lo que supone reducir su beneficio neto un 73% respecto al mismo periodo del año precedente, según informó recientemente en un comunicado. La cifra de negocio del conglomerado empresarial, al que también pertenecen las webs de citas Meetic y Match, alcanzó los 247.87 millones de euros de enero a marzo, un 21% más de facturación que en los tres primeros meses de 2015.

Reconversión al mundo «app»

La «agencia» de parejas online Meetic cayó en la cuenta de este fenómeno por lo que decidieron abrirse y profundizar en el mundo móvil. Está presente en todas las plataformas además de mantener las versiones para navegadores web con la que arrancaron en 2001 tras fundarse a manos de Marc Simoncini. «Siempre hemos estado a la vanguardia; cada persona va a querer conocer a otra como quiera, donde quiera, utilizando el método que desee», defiende la directiva de la compañía. «Ofrecemos el perfil más completo del mercado, el usuario dispone de cuarenta parámetros y criterios distintos para decidir la persona que te gusta».

El perfil medio de usuario de esta plataforma se encuentra entre los 32 años, con estudios universitarios y con un nivel socio-cultural medio-alto. En sus bases de datos consta que el 53% de sus usuarios son hombres, un 47% mujeres. En total, Meetic afirma que desde el 2002, han unidos a 6 millones de parejas y 2 millones bodas en Europa. En España las cifras son de 500.000 bodas. En cuanto a la motivación que lleva a una persona a abrirse una cuenta en una red de este tipo para iniciar un cortejo virtual, la directiva de la compañía reconoce que «no hay ningún detonante» porque cuando «buscas pareja utilizas todos los medios a tu disposición para encontrarla».

Acercarse a los diferentes tipos

La idea de estos cupidos virtuales ha sido estar «donde están los usuarios», por lo que la apuesta por el entorno móvil se debe, en parte, por la popularización de los dispositivos móviles en la sociedad; por otra, por el fenómeno de las aplicaciones de mensajería que han revolucionado las comunicaciones móviles. Por esta razón, incluso se han atrevido a meter la cabeza en los «wearables», siendo el primer servicio de citas que ha apostado por este modelo. «Por cada persona hay una forma de utilizarnos, con lo que hemos diversificado al máximo nuestros productos para no centralizarnos en un solo ‘target’ específico», sostiene.

En los últimos años, precisamente, los movimientos de la firma británica han ido hacia la personalización y el establecimiento de filtros de búsqueda. Hace cuatro años adquirió la compañía Twoo, especializada en algoritmos de emparejamiento, aunque una investigación iniciada por el medio especializado « Techcrunch» denunció métodos de «spam» en el envío de invitaciones a los contactos a través de correos electrónicos. Pero en ese esfuerzo por facilitar las cosas a sus usuarios, la compañía ha dispuesto otras opciones como la aplicación StepOut, que permite conocer gente en función de la ubicación en las inmediaciones. También han creado un «chatbot» para la aplicación Messenger.

Vuelta al mundo «offline»

Otra acción ejecutada por la firma ha sido la organización de eventos digamos «offline», es decir, actividades para que los solteros se puedan conocer en «sitios cercanos de casa en un ambiente relajado» o propuestas más extravagantes como aventuras para padres solteros. «No hay una brecha entre el mundo online y el offline», asegura. «Tú -cita como ejemplo- puedes conocer a una persona desde nuestro servicio pero al final hay que tener una cita, y esa cita tiene que ser en persona. Es como unas vacaciones, si reservas el vuelo y el hotel por internet luego tienes que coger el avión e irte a Canarias, por ejemplo». Y en esa línea han creado la figura del «coaching» para ayudar a las personas a encontrar las herramientas y recibir consejos para mejorar sus aptitudes de cara a conseguir pareja.

Rompiendo estigmas del pasado

Pese a que internet es global y está generalizado en gran parte de los hogares no solo españoles sino en los países más avanzados, la idea de conocer a gente en el mundo virtual aún tiene que soportar un estigma que considera que hay mucho engaño y te puedes encontrar a cualquier perturbado. «Para la gente está normalizado», subraya. «Internet forma parte de su vida, lo que hacen servicios como Meetic es ampliar tus oportunidades de conocer gente». En su opinión, el «estereotipo puede existir pero en los últimos años cada vez menos».

A su juicio, hasta hace unos años las personas se movían en círculos que giraban únicamente por la familia, el trabajo y los amigos. «Aunque siempre están las salidas, llega un momento en el que se hace más complicado, tus amigos empiezan a tener pareja, sales menos, trabajas más…» por lo que internet ha abierto las miras y facilita mucho encontrar al tipo de pareja que uno busca para su vida. «Hay una revolución en todos los sectores en torno a defender los cuerpos reales e imperfectas que es lo que nos hace únicos y los que nos hace que otra persona se enamore de nosotros», defienden desde la compañía, quienes recomiendan que «se tenga una cita en menos de un mes» para evitar caer en la idealización de la otra persona.