Apple retrasará las funciones más innovadoras de iOS y Mac hasta 2019

La industria de la tecnología y la innovación se ha envuelto en un lema permanente; que el ritmo no pare. Cada año, los fabricantes aspiran a lanzar nuevos productos, renovar sus plataformas y cautivar al gran público con funcionalidades que están por venir y que, en teoría, están enfocadas a hacernos la vida más fácil. Esa tendencia se está ralentizando. Es cada vez más difícil encontrar otra gallina de los huevos de oro.

Apple, consciente de ello, está allanando el terreno para ir con más calma en sus futuros desarrollos. El gigante estadounidense se ha acostumbrado a cumplir ciertos plazos en sus productos y software. Todo se mueve como un perfecto engranaje. En su cita anual para desarrolladores, el evento WWDC , que generalmente se celebra entre mayo y junio, se anuncian las novedades de sus sistemas operativos iOS y MacOS.

Un momento señalado que da comienzo a la rutina habitual para cumplir la hoja de ruta hasta llegar al día del lanzamiento oficial de un nuevo iPhone, que suele ocurrir en septiembre u octubre de cada año. Pero los ingenieros y desarrolladores empiezan a no dar a basto y a no poder seguir el ritmo que demanda tanto el mercado como la competencia. Según un informe filtrado al que ha tenido acceso Bloomberg , Apple ha decidido retrasar un año, hasta 2019, las novedades más sorprendentes e importantes de sus plataformas que deben no solo marcar tendencia sino asombrar a propios y ajenos.

La idea, según los analistas, es extender los ciclos anuales de desarrollo tecnológico, aunque eso no quiere decir que, un año más, el fabricante renueve su ecosistema como está previsto. El «annus horribilis» de la firma norteamericana en materia de seguridad le ha pasado factura. Para una marca acostumbrada a prestar con minuciosa atención todas las decisiones y lanzamientos , los reiterados descubrimientos de fallos de seguridad en iOS y MacOS han empañado su trayectoria. Y el motivo, aparentemente, se debe a haber dado por hecho muchas cosas, que han mermado considerablemente su fortaleza para lucirse en los detalles menores.

Son pocas las ocasiones que se recuerdan de la existencia de «bugs» y vulnerabilidades en el software facturado por Apple. La lista, ahora, es lo suficientemente larga como para aprender una lección; las prisas son malas consejeras. Por esta razón, se quiere bajar una marcha para coger nuevamente impulso. Los ingenieros, recalca esta publicación, tendrán más tiempo para pulir y mejorar sus propuestas en aras de no cometer ningún fallo . En los últimos tiempos se han retrasado o descubierto fallos en muchos de sus productos. Hay que recordar el más reciente lanzamiento, el altavoz inteligente HomePod que llega al mercado sin algunas de sus funciones más esperadas. La versión de iOS más actual, iOS 11, ha estado repleta de fallos y «bugs», mientras que en el pasado el modo retrato que debutó en el iPhone 7 Plus en 2016 llegó varias semanas más tarde.

Una serie de casos que se quiere evitar, pero eso no quiere decir que no se muestren en los próximos meses algunas novedades. Está previsto que la actualización anual del software de Apple (iOS 12 y macOS 10.14) de otoño añada a los usuarios multitud de características nuevas relacionadas con la aplicación de salud, reforzar los controles parentales, el refuerzo de más opciones de los «animojis» -avatares animados y personalizados- o nuevos sistemas de sincronización entre dispositivos, así como la incorporación del reconocimiento facial Face ID en el iPad. Entre algunas de esas funciones tan demandadas y que, en teoría, se han retrasado se incluyen más opciones para Apple Pencil -el accesorio para iPad Pro-, un sistema multitarea, así como más opciones para gestionar el correo electrónico y las notificaciones.