Sin filtros, despegada de estereotipos y sin tabúes sexuales: así es la «nueva» mujer en España

No ambicionan una vida perfecta. Ni serlo tampoco. Son conscientes de que tienen limitaciones, aunque cuiden los aspectos (como el físico) que deseen mejorar, y no aspiran a ser otra cosa que no sea ellas mismas. Así se definen las mujeres actuales en el último estudio elaborado sobre la mujer española por el instituto Ipsos. Coincidiendo con el Día Internacional de la Mujer Trabajadora que se celebra el próximo 8 de marzo, el estudio señala que a diferencia de lo que se cree, la mujer no compite con otras mujeres y la ve más como su aliada.

El informe tiene por objetivo comprobar cómo es la mujer actual española, cómo actúa y cómo se comporta con las marcas. Su principal conclusión es que nos encontramos ante un nuevo perfil de mujer moderna: sin filtros -de ahí el nombre que se le ha dado al estudio, «Unfiltered»-, que se desmarca de los estereotipos y cánones sociales que han marcado la tendencia habitual en las últimas décadas.

Para llevar a cabo este estudio se ha utilizado una innovadora fórmula basada en diarios secretos escritos por mujeres, en los que describían con palabras e imágenes las distintas facetas de su vida, así como sus deseos y frustraciones. Un ejercicio de reflexión que al ser anónimo ha permitido una mayor libertad a la hora de responder y, con ello, unas respuestas más sinceras, dicta el estudio, presentado este jueves 3 de marzo en Madrid.

Diseminado en los tres aspectos, ¿cómo es la mujer de hoy?:

Recoge el estudio las siguientes conclusiones: «A las mujeres de hoy día no les gusta compararse con los hombres, sino que buscan su felicidad creando su propio camino y su futuro».

En cuanto a su forma de ser, reconoce que sus necesidades son importantes, rechaza las vidas ultra perfectas e irreales, se acepta tal cual es sin aspirar a la perfección y su personalidad se sustenta, por tanto, en cuatro grandes pilares: la aceptación, no imposición, el egocentrismo y no culpabilidad. Tampoco tiene sentimiento de culpabilidad en caso de comer un dulce, lo que antes era un gran «mal» o lastre que asediaba al género femenino.

En un segundo apartado, ¿cómo actúa esa mujer?:

El estudio ha indagado en varios aspectos y facetas, como la maternidad, el trabajo, la sexualidad o la belleza y discierne entre dos corrientes de opinión muy distintos, que redundan en las que optan por no tener hijos y las que los tienen reconocen ser madres realistas, que «llegan hasta donde llegan y que huyen del término "supermamás"». Estas son las expresiones más utilizadas al autoclasificarse en su faceta maternal.

En el trabajo su comportamiento no es diferente: hay mujeres con grandes aspiraciones laborales, que buscan llegar a lo más alto o apostar por el emprendimiento y la iniciativa empresarial, y otras que lo que buscan es, simple y llanamente, «trabajar para vivir», según confiesan en sus diarios íntimos.

El estudio determina además que la mujer actual huye de estereotipos e imposiciones en materia de belleza y que se cuida solamente en aquellos aspectos que desea. «El caso de Rachel Hollis ejemplifica muy bien a esta "nueva" mujer: Rachel subió a la Red una foto de sus vacaciones en la que aparece posando en bikini sin ocultar las estrías en su vientre fruto de sus embarazos. Esta foto se hizo viral rápidamente y recibió multitud de mensajes de admiración de otras mujeres», afirma Louise Morrissey, de Ipsos.

Aviso a navegantes

¿Y cómo quiere que las marcas se dirijan a ella?

En tercer lugar, el estudio abarca la forma en que la mujer actual desea que las marcas contacten con ella, y en este sentido se dice «egocéntrica»; también convive con sus contradicciones que, de hecho, asume y le gustan.

No quiere que las marcas le hagan sentir culpable por nada y valora que le hablen directamente a ella, no como consumidora, madre o mujer sin imponerle un modelo de «mujer ideal».