La Asociación de Gaysy Lesbianas denunció la situación de discriminación de los miembros de este colectivo
La Asociación de Gaysy Lesbianas denunció la situación de discriminación de los miembros de este colectivo - ABC

El hotel portugués que discriminaba a gays, obligado a permitir «el acceso libre»

La ola de indignación en el país vecino ha hecho que las autoridades tomen cartas en el asunto

Lisboa Actualizado: Guardar
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Portugal ha abierto una investigación al hotel de lujo cercano a Viana do Castelo que prohibía la entrada a «gays, lesbianas, futboleros y festivaleros». La primera consecuencia es que las autoridades han obligado al propietario del inmueble a retirar el ofensivo texto que podía leerse en su página web.

Los clientes se encuentran ahora con una leyenda totalmente distinta: «El acceso a este hotel es totalmente libre», debido a que la discriminación expresada hasta ahora se estima como inconstitucional.

El eco mediático del caso desembocó en una ola de indignación que no ha hecho más que crecer al otro lado de la frontera en los últimos 10 días.

La Asociación de Gays y Lesbianas puso el grito en el cielo y, al final, ha logrado su propósito: corregir la situación y apercibir al dueño de que no puede dar cabida a este tipo de normas vejatorias.

Investigación

El proceso de investigación aún se halla en curso y podría terminar en la imposición de una multa de hasta 32.500 euros al establecimiento por su injustificable salida de tono.

La llamada de atención partió de una mujer portuguesa que quiso reservar unas habitaciones en el hotel. «Mi cuñado revisa siempre hasta la letra más pequeña y se dio cuenta de la discriminación, de manera que decidimos denunciarlo porque esto no puede aceptarse», dijo en la radio local.

El caso acontece justo cuando Lisboa, Oporto y Braga preparan la celebración delOrgullo Gay. La manifestación en la capital portuguesa se celebra este sábado 18 de junio y parte de los Jardines de Príncipe Real.

Además, el reciente asesinato de homosexuales en una discoteca de Orlando (Florida) ha revitalizado la necesidad de avanzar en la lucha contra las ofensas de este calibre.

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