El ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo (drcha.), que recibió al presidente de CRUE-Universidades, Segundo Píriz (izq.), la semana pasada tras el encuentro mantenido en la sede del Ministerio, en Madrid
El ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo (drcha.), que recibió al presidente de CRUE-Universidades, Segundo Píriz (izq.), la semana pasada tras el encuentro mantenido en la sede del Ministerio, en Madrid

Educación también planifica cambiar la reválida de Secundaria

La prueba que harán los estudiantes de 15 y 16 años desde 2017 tampoco será tipo test

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El Ministerio de Educación, Cultura y Deportes anunció hace seis días que va a modificar el examen de reválida de Bachillerato para que dicha prueba sea similar a la Prueba de Acceso a la Universidad (antigua Selectividad), eliminando definitivamente las preguntas tipo test, tal y como diseñó el anterior ministro, José Ignacio Wert. El actual titular del ramo, Íñigo Méndez de Vigo, reveló tras entrevistarse con los rectores que había pactado esa reforma, si bien en los borradores del Real Decreto y de la orden que regula las reválidas de Secundaria y Bachillerato incluidas en la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) se incluye también un viraje en el examen de reválida en Educación Secundaria, al que se enfrentarán los alumnos de 15 y 16 años a partir de 2017.

Todos los alumnos de 4º de la ESO tendrán que superar una prueba que Wert confirió para que fuese tipo test, celebrada en la misma fecha en toda España y que debía incluir 350 preguntas. De acuerdo con los borradores que estaría preparando Educación, se ha planificado que dicha prueba contenga preguntas abiertas, semiabiertas y de mútiples opciones y cuestionarios para evaluar los conocimientos de esos estudiantes que quieren acceder al título de graduado en Secundaria. En la primera convocatoria de la reválida de la ESO en 2017, no obstante, no se exigirá superar el examen para obtener el título.

Los mismos requisitos cambiados aluden a que la nota de la prueba contará un 30% para la evaluación final, mientras el resto de puntuaciones del curso ascenderán a un 70% de la nota. En el caso del Bachillerato, tal y como publicó el Ministerio del ramo en su página web la semana pasada, los porcentajes de la nota varían: la puntuación final del examen se fijará con un 60% de la media de las asignaturas cursadas en el Bachillerato y un 40% de la evaluación del Bachillerato. El examen de fin de la ESO durará 60 minutos, por 90 que lo haga la prueba para obtener el título de Bachillerato.

Con vistas a la Conferencia Sectorial

Siempre de acuerdo al contenido de dichos borradores, el examen de Secundaria se centrará en las materias troncales (Geografía e Historia, Lengua, Matemáticas y Lengua Extranjera) y evaluará competencias como la científico y tecnológica, la digital, aprender a aprender, competencias sociales y cívicas, sentido de iniciativa y espíritu emprendedor, y conciencia y expresiones culturales.

La confección de las nuevas pruebas pretende limar asperezas antes de la conferencia sectorial con los consejeros autonómicos, que tendrá lugar el próximo 13 de mayo, toda vez que varios de ellos se han opuesto a aplicar los criterios de evaluación pergeñados por Wert.

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