El violador del Tamarguillo se entregó porque lo convenció su expareja

Acababa de salir de prisión, donde cumplió nueve años por otra violación en 2003. Tras verse acorralado, le confesó la violación a la madre de su hija, que lo acompañó a la comisaría

El barrio del Parchís, zona en la que vivía el violador ABC

ALBERTO GARCÍA REYES

El cerco policial se estrechó tanto sobre él, que fue a confesar a su expareja, con la que tiene una hija, lo que había hecho el pasado lunes 28 de agosto en el Parque del Tamarguillo para pedirle consejo. M.A.F.D había visto a los agentes haciendo preguntas entre los vecinos de la problemática barriada del Parchís , en la zona Este de la ciudad, próxima al lugar donde fue violada atrozmente una mujer de 24 años que hacía deporte, como cada día, a última hora de la tarde. Pensó que la sospecha sobre él se había extendido por el barrio y temió por su integridad , así que fue a consultarle a la madre de su hija qué era lo mejor que podía hacer. Media hora después, recién comenzada la madrugada de ayer, se entregó en la comisaría de Policía . Le acompañaba ella, que le había convencido de que no tenía salida.

Así fue como a las 00:30 horas de del sábado fue detenido el presunto autor de la violación del Parque del Tamarguillo, un joven extremeño —procede de un pueblo de Badajoz, aunque lleva años empadronado en Sevilla— de 39 años que acababa de salir de prisión tras cumplir una condena de nueve años por violar a otra mujer en 2003.

Según fuentes policiales, en torno al presunto violador del Parchís se había montado un dispositivo de vigilancia , ya que todas las pesquisas realizadas conducían hasta esta persona. Esto provocó que el sospechoso se sintiese acorralado y acabara entregándose en la comisaría, donde en un primer momento habría declarado que temía que alguien se tomara la justicia por su mano y por miedo a sufrir alguna agresión, prefirió protegerse confesando ante los agentes todos los detalles del delito.

El caso está siendo investigado por la Unidad de Familia y Mujer de la Policía Nacional , la llamada UFAM, que puso ayer mismo por la tarde al detenido a disposición judicial. El juez, por su parte, decretó prisión sin fianza para el acusado, que desde anoche se encuentra ya en la cárcel. Las diligencias han logrado detectar al posible autor gracias a las descripciones que pudo hacer la víctima, aunque ésta no pudo ver la cara del agresor , y al rastreo realizado por la Policía a lo largo de este semana.

Desde un primer momento, los investigadores tuvieron claro que el autor de esta violación había tomado unas precauciones para evitar ser identificado de las que se desprendía que no era la primera vez que actuaba así , como finalmente parece confirmarse teniendo en cuenta los antecedentes de la persona detenida.

La víctima practicaba deporte en el parque del Tamarguillo, situado entre Sevilla Este y Parque Alcosa, alrededor de las 21:00 horas del pasado lunes cuando un hombre le propinó un violento empujón por la espalda después de que ambos se cruzaran y sin que ésta pudiera identificar su cara y sus características corporales. Cuando la mujer intentó ponerse en pie, el agresor volvió a golpearla y la dejó caer en un terraplén , desde donde la arrastró por el cuello para forzarla sexualmente en un espacio alejado de la visión de cualquier persona que pasara por allí. En ese momento, se produjo entre ambos un forcejeo que dejó heridas en la espalda y la cara de la víctima, principalmente, pero el violador se encargó de que en ningún momento ella pudiera identificarlo e incluso llegó a taparle la cara con una de sus prendas mientras la violaba .

La mujer, fuertemente conmocionada, se marchó a su casa y no puso la denuncia hasta la mañana siguiente porque se sentía aterrorizada. La Policía comenzó en ese mismo instante una investigación a partir de los escasos datos que pudo aportar la víctima. Rastreó todo el terraplén del parque en busca de posibles restos biológicos y cruzó toda la información disponible en sus archivos sobre el modo de operar del violador . Estas pesquisas permitieron señalar a M.A.F.D. como principal sospechoso, por lo que durante el viernes varios agentes sondearon la barriada del Parchís para confirmar que el presunto violador se encontraba por la zona.

En ese contexto, el agresor se personó en el domicilio de su expareja presuntamente para confesarle lo que había hecho y ella lo convenció para que se entregara a la Policía e incluso se ofreció a acompañarle . Él accedió y narró a los agentes todo lo que hizo, por lo que la investigación policial ha quedado cerrada.

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