Sombreros en verano: más que una moda, una necesidad

Esta prenda es un «arma extraordinaria» para quienes no quieran usar protección solar, según el doctor Conejo-Mir

Cada vez es más habitual ver sombreros por las calles de Sevilla P. Y.

PEDRO YBARRA

Es cierto que de unos años a esta parte se han puesto de moda los sombreros, sobre todo en los meses de verano. Así lo cree también el catedrático de Dermatología de la Hispalense y director de la Unidad de Gestión Clínica de Dermatología del Hospital Virgen del Rocío de Sevilla, Julián Conejo-Mir . Para el doctor Conejo-Mir, las campañas de fotoprotección se producen desde hace 25 años y «cada año la variamos con cremas o hábitos de vida. La fotoprotección se basa en un trípode que incluye la protección química (cremas y fotoprotectores), hábitos de vida (evitar el sol) y el uso de prendas que eviten que pase la radiación lumínica (sombreros, gafas, etcétera)

Protección solar

Según Conejo-Mir, «utilizar un sombrero es uno de los pivotes fundamentales para la protección , sobre todo porque hay gente que no puede utilizar cremas, que sería la opción mejor, aunque nunca es del 100%. «En este momento no hay ningún protector solar crema que supere el 90% de filtración. Para que una crema fuera 100% tendría que ser una crema absolutamente opaca, y eso es imposible, ya que sería como una máscara».

Otra de las limitaciones de las cremas es que hay gente que no se la compran, y que incluso un 40% de las familias que compran la crema no llegan a ponérsela », declara. Para suplir lo que no tienen los protectores solares, se puede «poner un cuerpo opaco delante de tu cuerpo para que no deje pasar el sol: un sombrero. Es magnífico porque te quita problemas en el cuero cabelludo y con el ala discretamente inclinada hacia abajo sería más beneficioso. Mejor que las «gorras americanas», que no es el modelo que más proteja, aunque son muchos quienes las utilizan», declara.

«Los sombrero de tipo cordobés o panamá son estupendos, pero si tuvieran el ala un poquito inclinada sería mucho mejor porque la sombra bajaría un poco más hacia abajo. El sombrero tampoco debería ser excesivamente fresquito , porque eso significa que tiene pequeñas perforaciones por las que pasaría el aire, pero la luz también, con lo que no protegería 100%», explica.

Ahora se ve más gente por la calle con sombrero que antes, sobre todo los hombres, ello se debe según Conejo-Mir a que «el sombrero es más opaco y los hombres no tienden a ponerse protección solar ni en la cara ni en el cuero cabelludo porque muchos excipientes son pringosos y no gustan. El sombrero es muy limpio y por eso ahora hay tantos, y cada año habrá más», afirma.

Antes los sombreros se utilizaban por comodidad, y dejaron de utilizarse en los años 40 por moda, aunque se perdió en los 60. «Ahora va a volver en plena época de verano porque es un arma extraordinaria para hombres que no quieran ponerse protección solar ya sea porque le pringue o le provoque sudoración. También en el caso de los hombres calvos, porque con los años prácticamente el 100% de los calvos terminan teniendo queratosis solar en el cuero cabelludo. Por ello el sombrero es un buen arma y cada vez se verá más en Sevilla y en las playas. No tengo la menor duda».

Cristina Vega, responsable de la sombrerería Maquedano, también cree que «se va siendo mas consciente de la necesidad de cubrirse, así que mas que moda yo diría necesidad», «Es muy importante el concienciarse de la importancia de ir cubiertos, ya sea en verano -con las altas temperaturas de nuestra ciudad- como en invierno. Moda puede ser en los jóvenes, pero a partir de cierta edad influye mas el tema de la salud», afirma.

Los más vendidos

Como afirma Cristina Vega: «Depende, ahora en verano, lo que más se venden son los panamás -aunque fabricados en Ecuador, su nombre le viene porque millares de sombreros fueron importados para el uso de los trabajadores de la construcción del canal de Panamá-, mientras que en invierno son sombreros más baratos y también muchas gorras», dice.

En verano, los materiales más demandados por los sevillanos serían los de «tipo paja, paja toquilla, ecuatoriana, etcétera, a diferencia del invierno que sería la lana», añade. En cuanto a quiénes son quienes compran más sombreros en Sevilla, depende también según la época del año, «pero en general, yo diría que un 60% serían extranjeros y el otro 40% serían sevillanos, o quizás al 50%.

En cuanto a la horquilla de precios de sombreros de calidad, los panamás, se pueden adquirir en una horquilla de 56 a 125 euros. Los sombreros de invierno se pueden comprar entre 50 y 80 euros los de mejor calidad, «aunque puede haberlos desde unos 30 euros», afirma Vega.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación